Entre la verdad y la ficción. LEER O NO LEER, ALLÍ EL DILEMA Por Jorge Luis Falcón Arévalo*

“Por desinformación, maestros rechazan reforma educativa”: Peña Nieto Contundente lo expresado por el presidente de la República. Pero habremos de entender que el CNTE, no tiene líder o cabeza visible. Y los del SNTE, su dirigente real y conocedora de la “magia” de las negociaciones, ¡Está en la cárcel! Por lo tanto, ¿Con quién se está negociando o con quienes, que no se ponen de acuerdo?

En tal asunto, la protesta se hace ante diputados y senadores. Invade calles, cierran oficinas. Alguien  de la sociedad, por allí dijo: “"Que los oprimidos protesten, pero lejos de mí, porque molestan". Hasta esos improperios y términos se está llegando; hasta no haya un “arreglo” que calme esas huestes que deben estar en las aulas. Bueno, eso se supone.

En las redes sociales, se postean o signan  impresos, de los desmanes que para unos cometen estos educadores; para otros, es una hazaña lograr estos actos vandálicos. Para los más, solo preguntan: ¿Dónde está quien debe aplicarles la ley?

La CNTE advirtió que “mientras no se establezca una mesa de negociación va a permanecer el bloqueo” Reza en un medio impreso. Esto nos demuestra lo que hemos expresado líneas anteriores: ¿Con qué dirigente hablan o no le entiende o no representa al grueso de los mentores?

El nivel de protesta sube. El panorama desolador en cuanto al dialogo. El buen diálogo es aquel que agota el tema sin agotar a sus interlocutores. Y en este tema, unos ya se agotaron. ¿Quiénes y de dónde? Ese es parte del dilema magisterial que azota diversos estados del país. Y que conste, entidades federativas de las más jodidas.

Bien dice la frase: “El diálogo es la base del entendimiento de las personas cultas” Yo digo lo mío, tú lo tuyo y entre ambos buscamos la verdad, ¿de acuerdo?

El CNTE y el otro SNTE, poseen las mismas capacidades de reacción; el sistema de gobierno, usa las políticas adecuadas para cada uno de ellos.

Malos maestros, excelentes escolares. Pésimos maestros un ejemplo de que el alumnado entiende que si no hay lucha, no se es rebelde. Maestros disgregados en sus conductas y posturas sociales y políticas no tan solo dentro de sus planteamientos, sino en sus aprendizajes, viene causando trastornos entre los estudiantes, cunde y se anida el mal ejemplo. Un valioso y brillante maestro, destaca, emerge y expone ante los ojos del respetable un colegial entre un millón. No lo destaca el INEGI, sino las evaluaciones realizadas por instituciones serias que miden grados de aprendizaje y capacidad entre los estudiantes.

El maestro actual no lee; o, al menos no sabe leer o traducir lo que lee. En ocasiones no lo entiende, ni logra visualizar qué lee. Por lo tanto si no lee, sus escolapios, tampoco lo harán, pues no hay mandato de tarea o ejemplo para hacerlo. Y si dentro de su hogar no existe ese quehacer, ese ejercicio, pues, es allí el comportamiento de protesta, de reproche,  de recriminación del mentor en las calles o edificios, representaciones populares o lo que haya vida que lesione la vida económica del municipio, estado o país.

@GradoCero_Gro