DAR DE LEER A LOS NIÑOS Y CUANTO MÁS PEQUEÑOS, MEJOR

Leer es como hablar con uno mismo y con otro a la vez, en simultáneo. Es un diálogo que se establece entre una persona y muchas otras que no están presentes físicamente, pero si en ideas.

Por eso es tan importante dar de leer a los niños y cuanto más pequeños, mejor. Cuanto antes las palabras arrullen, cuanto antes aprendan a descubrir y a entremezclarse con las palabras, las imágenes y las páginas de un libro, más precozmente los niños pondrán en práctica este tipo de actividad intelectual, de inmersión cultural y de vínculo amoroso.

Dar de leer asociando la lectura a lo afectivo, no a la caritativo, no por lástima o por llenar un hueco o reparar una culpa social, sino a la escena del adulto que da alimentos y palabras para hacer crecer y cobijar porque ama.

Descubrir el placer por leer es necesario para aprender y para saber más, sí, pero también para conversar, para divertirse, para hallar consuelo y compañía, para participar y actuar. Leer es por todo ello, un derecho.

Fue parte de lo que disertó la escritora Graciela Bialet en su conferencia “Cuanto antes mejor: libros para la infancia”, en esta ciudad capital como parte de las acciones del Programa de Fortalecimiento de la Calidad en Educación Básica.

Graciela Bialet compartió también que desde el Programa Volver a leer que coordinó en su natal Argentina, desarrollaron un proyecto tendiente a acercar sutiles y concienzudas sugerencias a cerca de la importancia de dar de leer desde que el bebé nace, y tramaron una alianza con los centros de salud pediátricos, para que en la consulta al médico, mes a mes, el mismo especialista que recomienda las acciones alimentarias, higiénicas y motoras que el pequeño necesita para crecer saludable, sugiriera la lectura como alimento intelectual y  afectivo. Así se produjo un material de apoyo y distribución gratuita al que llamaron “Sana sana, atención temprana en lectura”.

Un folleto dirigido a toda la población, en un lenguaje sencillo y una estrategia basada en preguntas claves: ¿Cómo leerle a los más pequeños?, ¿Dónde leer? ¿Cuándo leer? ¿Quién leer? ¿Qué leer?