APOYA EL CRIG CON PRÓTESIS PARA PERSONAS CON DISCAPACIDAD

El encargado del taller del CRIG, José del Carmen Ayala explicó que al año elaboran 300 plantillas para pie plano, 200 férulas para problemas físicos y 80 prótesis de pierna para personas mayores, cuyo costo en el mercado alcanzan hasta los 40 mil pesos.

Con el objetivo de ofrecer una atención directa a los pacientes que han perdido alguna de sus extremidades, el DIF Guerrero fabrica prótesis y órtesis para quienes reciben los servicios médicos en el Centro de Rehabilitación Integral Guerrero (CRIG) y la población en general.

En el taller se elaboran las prótesis de piernas y manos, férulas y plantillas para atender las diversas necesidades de las personas con discapacidad, adultos mayores y niños que solicitan el apoyo.

El encargado del taller ubicado al interior del CRIG en Chilpancingo, José del Carmen Ayala explicó que al paciente que requiere de una prótesis se le aplica un examen de revaloración, además que se le toman medidas y se trabaja en los moldes con yeso y laminados.

Explicó que en el caso de las personas con diabetes, se debe verificar que tengan buena circulación, su peso controlado al igual que la glucosa. Además se requiere que el muñón de la pierna esté cicatrizado, ya que podría provocarle infecciones y molestias.

El señor Odilón Almodóbar del municipio de Canuto Neri,
recibió su prótesis de pierna, luego que hace tres
años le fue amputada a causa de un
accidente automovilístico.

Agregó que al año en el taller del CRIG se elaboran 300 plantillas para pie plano, 200 férulas para corregir problemas físicos y 80 prótesis de pierna para personas mayores, cuyo costo en el mercado alcanzan los 40 mil pesos, pero a través del DIF Guerrero se entregan con una cuota de recuperación menor.

El señor Odilón Almodóbar Cruz de 65 años, procedente del municipio de Canuto Neri, recibió su prótesis de pierna del taller del DIF Guerrero, debido a que haces tres años le fue amputada a consecuencia de un accidente automovilístico.

Acompañado de su esposa, salieron de su vivienda desde temprana hora para acudir a la última prueba en el taller de Prótesis y Órtesis del CRIG, ya que debido a que bajó de peso le hicieron modificaciones para adaptarla a su muñón, para que pueda utilizarla de manera correcta.

“La vida ha sido difícil porque no puedo trabajar como antes, pero ahora con mi nueva pierna podré ayudar en las actividades de la casa y valerme por mí mismo. Antes del accidente yo sembraba y le daba de comer a mis animales y ahora con mi prótesis espero empezar poco a poco hacer las cosas que antes hacía”, comentó.