THE ECONOMIST EXPLICA LA DIFERENCIA ENTRE LA LEGALIZACIÓN Y DESPENALIZACIÓN

La guerra contra el cannabis parece lentamente a agotarse. El 26 de febrero se convirtió en legal de poseer y cultivar pequeñas cantidades de la droga en Washington, DC. Dos días antes, la posesión de marihuana había convertido legal en Alaska. Cuatro estados, así como la capital, han votado a favor de legalizar el uso recreativo de la marihuana, y otros 19 han legalizado con fines médicos (a menudo más bien interpretarse en sentido amplio). Uruguay ha legalizado la droga también. Otros lugares han adoptado un enfoque diferente, la despenalización, pero no la legalización. El 25 de febrero de Jamaica aprobó una ley que despenaliza la posesión de pequeñas cantidades de marihuana. Varios otros países, principalmente en Europa y América Latina, han hecho lo mismo; Portugal ha despenalizado la posesión de todas las drogas. Muchas personas utilizan erróneamente los términos "legalización" y "despenalización" de manera intercambiable. ¿Cuál es la diferencia?

El negocio de la droga ilegal causa daños en dos frentes. En primer lugar, las propias drogas hacen daño físico a por lo menos algunas de las personas que los toman, sobre todo en el mundo rico, pero cada vez más en nuevos mercados (Brasil es el mayor consumidor mundial de cocaína, por ejemplo). En segundo lugar, el comercio enriquece las bandas criminales, que se extendió la corrupción y el asesinato de Sydney a S ã o Paulo. Durante mucho tiempo, casi todos los gobiernos pensaron que la mejor manera de reducir ambos tipos de daño fue a impartir duras penas a aquellos que compran y venden drogas. Pero después de varias décadas de ese enfoque, con poco que mostrar por ello, algunos están recurriendo a tácticas alternativas.

 

La despenalización no significa que la gente puede usar drogas con impunidad. En su lugar, significa que la posesión de pequeñas cantidades ya no se aterriza el autor con un registro de antecedentes penales o una pena de cárcel. Bajo la nueva ley de Jamaica, las personas atrapadas con hasta dos onzas (57 gramos) de cannabis puede ser multado, pero no arrestado o llevado ante los tribunales. Los consumidores de drogas en Portugal pueden ser obligados a asistir a las clases dirigidas a conseguir de nuevo en el buen camino. Las personas que se encuentran con el cannabis en Italia pueden tener sus permisos de conducir confiscados. Por el contrario, la legalización, por el estilo promulgada en Uruguay y un puñado de estados de Estados Unidos, significa que los consumidores no se enfrentan a la pena en absoluto (a menos que, por ejemplo, que fuman en lugares públicos). Más importante aún, significa que el lado de la oferta de la empresa-cultivo, transporte y venta al por menor-también es legal. En Jamaica, la venta de cannabis seguirá siendo un delito; en Alaska que pronto será una ocupación imponible legítimo.

Despenalización puede ser un primer paso útil hacia un enfoque más sano a las drogas. Luchando contra una tasa de homicidios temible, la policía de Jamaica seguramente tienen mejores cosas que hacer que la gente de arresto para drogarse. En cualquier caso, el envío de los usuarios de drogas a la cárcel es por lo general una costosa pérdida de tiempo. Pero el defecto de la despenalización es que no hace nada para socavar el monopolio criminal de la industria de la droga de miles de millones de dólares. La cocaína despenalizado consumida sin consecuencias penales en Portugal todavía es suministrada por las bandas que le cortaron la cabeza en Colombia. Washington, la versión de DC de la legalización es igualmente errónea: si bien la posesión se ha legalizado, el Congreso ha impedido que la ciudad de la legalización de la compra y venta de la droga. Por lo tanto, los negocios olla de la capital seguirá siendo un monopolio criminal. La nueva ley es una buena noticia para las personas que inofensivamente drogarse. Pero a menos que se siguió con el tiempo por la legalización del lado de la oferta de la empresa, también es una buena noticia para los ladrones que lo venden.