Por ejemplo, en horas
pico, el personal, ahora conocido como bandereros, son apostados en diversos
cruces de la ciudad para contribuir con la labor que también llevan a cabo
agentes de Tránsito del gobierno del estado.
Al respecto se entrevistó
al trabajador Ramiro Reynoso Reséndiz, quien se estaba apostado entre Cerro
Azul y Cuauhtémoc, e indicó que les va bien porque hay muchas personas que les
agradecen, otras no.
Considera como un
aliciente el gesto de agradecimiento porque “somos nuevos, pues, pero sí hay
mucha gente que lo agradece”.
Explica que él está
asignado al área de Alto riesgo de la dependencia pero ahora se halla apoyando
en lo que es la vialidad.
La labor es ardua para
este equipo de trabajadores porque indicó que también hay muchos automovilistas
que sí acatan sus indicaciones y ejemplificó como otros no respetaban el turno
que les correspondía.
Ramiro Reynoso compartió
que incluso hay quienes les echan el carro encima, “¿pero qué se le va a hacer?
Tratamos de hacer el trabajo bien”, dijo.
De tener la oportunidad de
hablar con los automovilistas, señaló que les diría que “nos dieran chance pues
también ellos, que nos entendieran en este caso por hacer esta labor es para,
como dicen, para bienestar de ellos mismos pues y de la vialidad en Acapulco.
Tratarle de ayudarle a Acapulco y a la gente que viene, a la gente, también
local”.
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