MIENTRAS EN EL FRENTE
INTEGRADO por el PRD, el PAN y el MC, ya tienen definida su fórmula para el
Senado, encabezada por Beatriz Mojica Morga, y Morena-PT ya decidió que la
encabece Félix Salgado Macedonio, en el PRI-Verde aún no se decide quién habrá
de encabezarla, aunque de manera insistente se menciona a Héctor Apreza Patrón
y a Claudia Ruiz Massieu.
La razón, dicen los que
saben, es que la dirigencia nacional del PRI, y quienes finalmente deciden las
candidaturas al Senado, no tiene una decisión final sobre si la fórmula para
Guerrero la encabezará un hombre o una mujer, o viceversa. Si se decide que
debe ser un hombre, entonces no hay duda que el candidato será Héctor Apreza,
pero si la decisión es que en la primera fórmula va una mujer, entonces, aseguran,
quien habrá de ser la candidata será Claudia Ruiz.
Por supuesto, si la primera
fórmula va un hombre, en la segunda tendrá que ir una mujer, o viceversa, y
según parece, pocos de los aspirantes quieren encabezar la fórmula número dos,
toda vez que, dado las circunstancias de la elección del 2018, será de tres y
no de dos como muchos tenían previsto. Y es que, además, quien integre la
primera fórmula, aunque pierda la elección, como primera minoría, accede al
Senado.
Por supuesto, en la lista de
aspirantes del PRI al Senado de la República, también se encuentran Mario
Moreno Arcos, Verónica Muñoz Parra y Manuel Añorve Baños, quienes también
tienen posibilidades de convertirse en candidatos, toda vez que en política los
escenarios cambian de un momento a otro.
Y HABLANDO DE CHILPANCINGO,
todo indica que el candidato a la alcaldía por el Frente será el perredista
Antonio Gaspar Beltrán, pues el PAN es casi inexistente en el municipio, lo
mismo que el MC, pues a su principal gallo, Pioquinto Damián Huato, quien se
dice dirigente de comerciantes, le gana con una mano en la cintura hasta el
“Señor Pay de Queso”, quien en la elección pasada barrió y trapeó con él.
En tanto, en el PRI todavía
no hay candidato o candidata, según se quiera ver, aunque se mencionan con
mayor insistencia a Jorge Salgado Parra, a quien por cierto la dirigencia
nacional del tricolor lo reafilió con todas las de la ley, al cumplir con los
requisitos establecidos en sus estatutos, de tal forma que puede aspirar a
contender por la candidatura capitalina sin ningún problema.
Beatriz Vélez Núñez es otra
de los priístas que tienen suficiente con qué para convertirse en candidata a
la presidencia municipal de Acapulco. Tiene, por supuesto, estructura, arraigo
y carisma, por supuesto, capacidad para convertirse en la sucesora de Jesús
Tejeda Vargas.
Beatriz Vélez y Jorge
Salgado son los que más se mencionan por el PRI, aunque también están en la
misma sintonía Cesar Armenta, uno de los cuadros más jóvenes y capaces del PRI,
razón por la cual se desempeña como secretario particular del gobernador del
estado, Héctor Astudillo Flores. Tampoco debe descartársele.
Y claro. Ricardo Moreno
Arcos también tiene lo suyo. Al igual que los tres primeros, no solo tiene las
canicas suficientes para convertirse en candidato, sino también capacidad y
experiencia en la función pública. Ciertamente a ninguno debe descartarse, pues
la decisión aún no está tomada, y más cuando los que van a decidir todavía no
se ponen de acuerdo, primero en que si será hombre o mujer quien encabece la
planilla, y segundo, quién conviene más.
POR ÚLTIMO, EL SENADO alista
cambios a la minuta de Ley de Seguridad Interior, a fin de atender las demandas
de especialistas, académicos y organizaciones de la sociedad civil. Lo anterior,
de acuerdo al coordinador del PRI en el
Senado, Emilio Gamboa Patrón, quien dijo que las comisiones dictaminadoras
analizarán las inquietudes de la sociedad civil, a fin de buscar el consenso
necesario para que la ley pueda ser aprobada antes de que concluya el periodo
de sesiones.
Entre los ajustes que se
pretende realizar al proyecto destaca el contemplado en el artículo 7, para
especificar que los actos realizados por las autoridades con motivo de la ley
deberán “respetar, proteger y garantizar” en todo momento los derechos humanos
y sus garantías. Además, se agrega que dichas acciones deberán realizarse de
conformidad “con lo dispuesto en la Constitución y los tratados internacionales
y los protocolos emitidos por las autoridades correspondientes”.
De igual forma, los
senadores propondrán eliminar el párrafo que remite a la aplicación del
artículo 29 constitucional para la suspensión de derechos, en caso de
perturbaciones graves a la paz pública o cualquier otro que ponga a la sociedad
en grave peligro. Por otro lado, en lo que respecta al artículo 8 de la ley, se
plantea eliminar la referencia a las protestas que se lleven a cabo
“pacíficamente”, a fin de preservar el derecho a la libre manifestación
contenido en la Carta Magna.
Además, en el artículo 22,
se propone agregar que “cuando la amenaza no requiera la Intervención de las
Fuerzas Armadas, el Presidente de la República designará a la autoridad civil
que corresponda a propuesta del secretario de Gobernación”.
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