EPÍSTOLAS SURIANAS (Carta a Don Héctor) De Julio Ayala Carlos

EN EFECTO, COMO DIRÍA el entonces gobernador, quien este miércoles solicitó licencia para dejar de cobrar como senador de la República y hacerlo a partir de ya como subsecretario de Gobernación, René Juárez Cisneros, Guerrero no es Disneylandia, para señalar que aquí, en estas tierras indomables del sur, no es fácil gobernar el estado.

Y es que el estado, desde su creación como tal, tiene problemas, como consecuencia de la marginación y pobreza en la que se encuentra, de tal forma que éstos dos ingredientes son caldo de cultivo para la generación de otros, como la inseguridad y la violencia, sin dejar de mencionar, los de carácter social que, como ya sabemos, dieron origen, en su momento, a movimientos guerrilleros en el estado.

Sí. No es fácil gobernar Guerrero, y lo sabe no solo el PRI, sino también el PRD. Precisamente por eso, en su momento cayó Rubén Figueroa Alcocer, y luego, hace poco, Ángel Aguirre Rivero.

Sí. No es fácil. Por eso es que el gobernador del estado, Don Héctor Astudillo, al reunirse con miembros del Grupo Cuicalli, quienes por cierto se asumen como la voz de la sociedad civil, lo cual es un exceso, anunció cambios en su gabinete, a fin de trabajar con los mejores hombres del estado, o en su caso, para reforzar secretarías donde la acción de gobierno debe dar mejores resultados.

Qué bueno que así lo haga el gobernador del estado. Más allá de las amistades, los guerrerenses esperan de su gobierno más acciones, más resultados para revertir las condiciones de pobreza y marginación, así como para resolver los grandes problemas que enfrenta el estado, como la inseguridad, por encima de otros.

En fin, qué bueno que el gobernador Astudillo haya anunciado que habrá una sacudida con cambios de funcionarios en el gabinete del estado, y qué bueno que traiga en mente nombres de personas que podrían hacer un mejor papel, que los que actualmente están.

Por cierto, uno de los cambios de los que se habla es el del secretario general de Gobierno, Don Florencio Salazar Adame. Y no es que el ex embajador en Colombia y ex secretario de la Secretaría de la Reforma Agraria no dé el ancho, como se dice, sino porque atenderá otras cuestiones. Lo cierto es que desde hace algunos día ya empezó a sacar de su todavía oficina sus pertenencias personales.

Y hablando de Chilpancingo, en la reunión con el Grupo Cuicalli, el mandatario estatal señaló que en la capital del estado “hay delincuentes más peligrosos que en otros lados; todos son peligrosos, pero aquí lo son más porque, porque en Acapulco son bandas que se dedican a vender drogas, para asaltar y extorsionar, y el tema de aquí igual que el de Iguala, es que están buscando el control de la amapola, y todas esas bandas que están ligadas a este esquema. Son más peligrosas todavía".

No obstante, pese a reconocer que el tema es muy complicado, se comprometió a "no dar ni un paso para atrás". No obstante, aclaró que se requiere de todo el apoyo del gobierno federal, destacando que la operatividad de las 50 ciudades más violentas entre las que hay 5 de Guerrero, apenas empieza.

Y tiene razón el gobernador. Guerrero es un estado que se ha convertido en un problema de seguridad nacional, por lo cual existe apoyo de las fuerzas federales, desde la Gendarmería, la Policía Federal, el Ejército y PGR. Sin embargo, "no pueden estar en todos lados, y ayer (martes), no pudieron estar aquí en Chilpancingo", en referencia al asalto a una urvan en donde murieron, entre otros, dos normalistas.

En efecto, la violencia existente en Chilpancingo, va más allá de lo que pueden hacer sus autoridades. En Acapulco, por ejemplo, los muertos son más, y nadie dice nada. El PRD, y los jilgueros de Evodio Velázquez ven la paja en el ojo ajeno, y no la viga en el propio. Será que allá sí cobran y acá, no?

Y es que en Chilpancingo le echan la culpa a Marco Antonio Leyva Mena hasta de los zancudos, cuando en Acapulco cabalgan como en su hacienda el dengue, la chikungunya y el zika. Jijos!

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