SI EL AYUNTAMIENTO DE
CHILPANCINGO tiene un déficit mensual de 15 millones de pesos por el pago de trabajadores, es decir, porque
no se tienen los recursos suficientes para pagarles, ¿cómo es que los
trabajadores no entienden que no hay más recursos para ellos, y en consecuencia
no se puede incrementarles el salario en la proporción que ellos exigen?
Es cierto que los
trabajadores, todos, deben percibir un mejor salario. Sin embargo, también es
muy cierto que si el Ayuntamiento capitalino carece de los recursos necesarios
para incrementarles su ingreso, no tiene por qué hacerlo.
De acuerdo con el
presidente municipal de Chilpancingo, cada mes el gobierno que encabeza tiene
un déficit de 15 millones de pesos, debido a que existen trabajadores sin techo
presupuestal, es decir, porque se carece de presupuesto para pagarles, de tal
forma que, o se tiene que tomar recursos de otros rubros, o se pide prestado
para ello.
Y si no hay recursos
suficientes para cubrir el pago de trabajadores, que suponemos, desempeñan con
creces su trabajo, mucho menos el gobierno municipal de Chilpancingo tiene
recursos para incrementarles su salario, y claro, tampoco para el pago de sus
prestaciones, bonos y festejos, y por supuesto, menos habrá para pagarles, en
diciembre, su aguinaldo correspondiente.
Reitero. Supongo que los
trabajadores, todos, desempeñan con creces su trabajo en el gobierno municipal,
aunque muchas veces, y lo he visto, solo van “checar” su asistencia y se salen
de su área de trabajo para hacer cualquier cosa, menos cumplir por lo que les
pagan. Por supuesto que no todo es culpa de ellos.
Lo cierto es que mientras
el gobierno municipal que encabeza Antonio Gaspar Beltrán no tiene los recursos
suficientes para pagarles a todos los trabajadores, y que sin embargo tiene que
hacerlo, generando un déficit anual de 180 millones de pesos, los trabajadores,
como los que mantienen bloqueado el Palacio Municipal, exigen incremento
salarial, y más aún, las bases que les fueron anuladas en razón de que el
anterior se las entregó de manera irregular.
Y mientras eso ocurre, el
Palacio Municipal se encuentra cerrado, y en consecuencia, una gran parte de
las acciones de gobierno están paralizadas, en razón de que la gran mayoría de
las dependencias del gobierno capitalino se encuentran ubicadas en la sede del
Ayuntamiento.
Hay que decirlo. El
conflicto entre los trabajadores que tienen paralizadas las acciones del
gobierno municipal, y que en gran medida afecta a la población, no solo tiene
que ver con el Ayuntamiento capitalino, y más concretamente con el alcalde
Antonio Gaspar Beltrán, sino con todos los chilpancinguenses, en razón de que
los afecta de una u otra manera.
Y es que mientras los
trabajadores se aferran a que se les cumplan sus demandas, que tienen que ver
con dinero, el cual no tiene el gobierno municipal, los chilpancinguenses,
incluidos los de las comunidades rurales, no solo no pueden realizar algún
trámite burocrático o gestión de recursos para su barrio, colonia o comunidad,
sino que tampoco pueden pagar sus impuestos, los que, dice el alcalde, se
utilizan para pagar el salario a los trabajadores.
Sin duda tiene razón
Antonio Gaspar. Cerrar el Palacio Municipal no es la mejor forma de resolver
las demandas de los trabajadores, en razón de que por cada día que se cierra se
dejan de percibir 350 mil pesos de
ingresos propios, además de que se afectan las acciones de gobierno, y se
afecta de manera directa a la población. Sin embargo, eso parece no importarle
a los trabajadores, pues ellos quieren su lana, y ya.
Creo, no tengo duda, que
el presidente municipal puede, si fuera irresponsable, como otros alcaldes, les
daría los trabajadores todo lo que le piden, y más, y con ello no tendría
problemas con ellos ni que le cerrarían el Palacio Municipal, sin embargo, a la
larga generaría mayores problemas, como los que le heredaron, razón por la cual
no hay recursos suficientes para pagarles actualmente.
Hay que decir, por último,
que Antonio Gaspar Beltrán ha solicitado al gobierno federal que encabeza el
presidente Andrés Manuel López Obrador, rescatar financieramente al
Ayuntamiento de Chilpancingo, dado el quebranto que le fue heredado. Hasta
ahora, por desgracia, solo ha encontrado oídos sordos del Presidente.
Concluyo. Sin duda los
trabajadores del Ayuntamiento municipal deben ganar más y mejor; sin embargo,
como bien lo dice el alcalde, no se cuentan con los recursos para ello. Creo
que los trabajadores deben entender la situación del gobierno municipal. Al
final de cuentas, si no están a gusto con lo que les pagan, tienen la opción de
emplearse en otro trabajo donde les paguen lo que ahora exigen.
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