Media década ha transcurrido desde la masacre de los normalistas. Este hecho deleznable y anti natural, me recuerda a los Mártires de Lídice.
El 27 de mayo de 1942, el
nazi, Rehinhard Heydrich, sufrió un atentado en Praga que le costó la vida.
Como venganza contra el pueblo checo, se llevaron a cabo matanzas sin saber la
verdad de quién o quiénes habían sido los autores del operativo. Y sin tener
elementos probatorios, los nazis entraron a saco al pueblo de Lídice el 10 de
junio de 1942. Por considerar que habían protegido a los culpables. 192 habitantes
masculinos, incluyendo adolescentes fueron fusilados. La suerte de 192 mujeres
y 104 niños, fueron enviaron a campos de exterminio, donde 82 niños
fallecieron.
Este acto, uno entre cientos
cometidos por los nazis, es un ejemplo de que ese genocidio, ya no debe de
multiplicarse, de ahí que los hechos de la Noche de Iguala, no solo pararon el
mexican moment de Enrique Peña Nieto, si no que esa masacre nos hereda una
huella de vergüenza, impunidad, corrupción y mentiras del estado mexicano, no
solo contra familiares de los asesinados, sino contra el pueblo de México.
En en el estado de Guerrero,
Aguas Blancas, el 21 de junio de 1995, fueron masacrados 17 campesinos tal y
como lo relata en forma metafórica la CNDH:
“La mañana del 28 de junio
de 1995, algunos miembros de la recién formada Organización Campesina de la
Sierra del Sur (OCSS) se dirigieron a Coyuca de Benítez con el propósito de
pedir el cumplimiento de las promesas de ayuda para los cultivadores de café.
Los campesinos iban en dos camiones de carga: el primero fue detenido en “El
Vado” por un grupo de policías y agentes judiciales del estado. Los hicieron
descender y, con golpes, los obligaron a acostarse en el suelo, a esperar.
Cuando llegó el segundo vehículo el procedimiento se repitió, pero justo antes
de concluirlo los policías y agentes judiciales dispararon contra los
indefensos campesinos durante casi 20 minutos”. (CNDH).
Como en Lídice, en Acteal,
fueron masacrados el 22 de diciembre de 1997, en una iglesia del municipio de
Chenalhó, Chiapas, 45 Tzotziles. 16 niños, niñas y adolescentes; veinte
mujeres, de la cuales siete, estaban embarazadas y a nueve hombres adultos,
asesinados por para militares. El estado calló. Igual con la matanza del
Charco, el domingo 7 de junio, once muertos, cinco heridos y 22 detenciones. El
incendio de la Guardería ABC.
El 24 de agosto de 2010,
fueron ejecutados “72 migrantes, 58 hombres y 14 mujeres, en un rancho del
Ejido el Huizachal, en el municipio de San Fernando, Tamaulipas”. Y la lista
sigue, Tlatlaya, y hace seis años, la matanza de Iguala, entre otros asesinatos
masivos.
En la muerte y desaparición
de 43 estudianes normalistas de Ayotzinapa, ¿que viene en esta égida de muerte,
soloTomás Zeron de Lucio es el responsable? ¿Quién le dio la orden y autorizó
millonarias cantidades de dinero para encubrir esas 24 horas tan crueles como
la noche de Lídice el amanecer del Charco en el interior de una escuela
tiroteada y la madrugada de Iguala?
El hilo se rompió por lo más
delgado. Es obvio que estan involucrados personajes del “mas alto nivel” del
gobierno mexicano. ¿Van armar otra consulta para ir por ellos?
DE LA PATADA
La salida de Margarita
González Sarabia de la Secretaría de Turismo y Cultura, de Morelos, ese binomio
funcionalista y una dicotomía disfuncional, ha causado revuelo en la comunidad
cultural morelense, que apechugó el tumulto de males a los creadores surianos;
Cristina Faesler Bremen que aterrizó en Morelos gracias a ser amiga de la
esposa del ex mandatario de negro historial.
La llegada primero a la
presidencia de Cuernavaca y después a la gubernatura por Morena, de un
futbolista profesional, a quien el Filósofo de Cuahichiles ha rebautizado como
el “Pitágoras de Tepito”, que se
equivoca en sumas y restas y permite fallas en los penales que confunde con
tiros a gol, Cuauhtémoc Blanco Bravo que mantiene el gobierno de Morelos de la
patada y tiene a su ex coach José Manuel Zanz Rivera, de sabelotodo, al que “La
Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) encabezada por Santiago Nieto, tiene
bajo la mira a José Manuel Sanz Rivera, jefe de una Oficina de Morelos,
Cuauhtémoc Blanco, por realizar movimientos inusuales por 741 millones de pesos
y retiros en efectivo por 122 millones de pesos. De acuerdo con el periódico
Reforma, se trata del “Caso Primavera”, el cual fue dado a conocer el miércoles
4 de marzo por Santiago Nieto durante la conferencia de prensa de Palacio
Nacional. Nieto detalló que habría reportado ingresos totales por 3.5 millones
de pesos entre 2013 y 2018. Aseguró que entre octubre y noviembre de 2017, el
funcionario investigado recibió 25.7 millones de pesos en una cuenta personal
en Suiza y que su presunto operador de transferencias internacionales realizó
movimientos inusuales que suman 741 millones de pesos y retiros en efectivo por
122.8 millones de pesos de 2015 a 2019”. (Infobae/5/marzo/2020).
El mismo camino lleva Ulises
Bravo sin cargo alguno, al igual que el hijastro de Graco, de apellido
funerario Gayoso, el hermano del Cuauc, está al frente de jugosos negocios que
están siendo investigados y los rumores apuntan a que su hijo podría estar al
frente de la cultura.
En ese escenario y con el problema
que se avecina por Huexca, la comunidad cultural, exige la separación de las
dos secretarías y que quien nombre el gobernador para cultura, sea una mujer u
hombre con perfil, conocimiento, sensibilidad con capacidad de planificación
técnica y administrativa. Un grupo propone a Miguel Izquierdo, en la cancha de
Cuauhtémoc, que nada sabe sobre cultura, se barajan otros nombres con cierto
pedigrí; Helena González y Cecile Camil de Abe.
Al mandatario que no le
cuadran las sumas y restas, y menos conocimiento de la cultura morelense, y de
para que sirve una cosa de esas si no tiene tachones para patear ni porterías
para anotar o fallar. La confundición del gobernador respecto a la cultura en
esta cascarita, está de la patada. El balón esta en el aire.
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