Groucho Marx solía decir:
“Aquí están mis principios. Si no le gustan tengo otros”.
“¡Quítenle el celular!”, gritaron al menos
seis encapuchados. Agredieron a un joven de apellido Lozano. Les tomaba
fotografías cuando destruían una patrulla frente al auditorio Sentimientos de
la Nación. En el megáfono se escuchaba la arenga: “esos jóvenes traidores al
pueblo son cómplices…” Se referían a estudiantes de la Universidad Autónoma de
Guerrero que asistieron a un evento organizado por la Coparmex.
Ahí mismo golpearon a un
reportero del diario digital SoloChilpancingo.com. Robaron su equipo al
periodista Miguel Ángel Arrieta. A una jovencita le arrebataron su Ipad. Le
dieron dos bofetadas y la intimidaron con garrotes. A una señora de avanzada
edad la asustó uno con máscara de calavera: “¿Qué no oyó que no tome fotos?”,
le dijo al momento de arrebatarle un celular Nokia. De esos que tienen
lamparita, radio y teléfono, pero no toman fotos.
Algunos traidores al
oficio acompañan a los pandilleros embozados. Ellos dicen quién sí. Quién no.
Según sus rencores, sus humores, sus resentimientos. Acusan de “pseudo
periodistas” a quienes no piensan como ellos. A quienes no convierten en
verdades las mentiras del terrorista
Movimiento Popular Guerrerense.
CAMPAÑAS
DE ODIO
Adolfo Hitler destiló odio
con su libro Mi Lucha. Mao Tse Tung hizo lo propio con el Libro Rojo. Sus
“luchas revolucionarias” dejaron millones de muertos y desaparecidos.
Castigaron ser diferentes o pensar distinto. En América, Fidel Castro y su
hermano Raúl han llenado las cárceles con quienes han cometido ese delito: ver
la vida de otra manera.
Ninguno de ellos, sin
embargo, castigó el delito de pensar
distinto como Saloth Sar, conocido como Pol Pot. Dictador camboyano y el
principal líder de los Jemeres Rojos, desde 1960 hasta su muerte en 1998. Fue primer ministro de Kampuchea
Democrática. Forjador de un estado de corte maoísta. Igual a los embozados que
han tomado por asalto al estado de Guerrero.
Saloth Sar llevó a cabo
una drástica política de reubicación de la población de los principales centros
urbanos hacia el campo como una medida determinante hacia el tipo de comunismo
que deseaba implantar. Los medios empleados incluyeron el exterminio de los
intelectuales y otros "enemigos burgueses".
El resultado de ello fue
la desaparición de entre un millón y medio y dos millones de personas. El 17 de
abril de 1975, año en el cual los jemeres rojos tomaron Phnom Penh, había en
Camboya una población de 7,3 millones de habitantes. Tres años después, en
1978, la población disminuyó a 6 millones.
En Guerrero el Movimiento
Popular Guerrerense ha emprendido una
campaña de odio en contra de quienes piensan distinto a ellos. Escriben sus
mentiras de tal manera hasta convertirlas en verdades. Igual que hacían los
voceros de Hitler. Como Mao. Como los Castro. Como Pol Pot.
FUNDAMENTALISTAS
El fundamentalismo es otra
cosa. Es una corriente religiosa o ideológica que promueve la interpretación
literal de textos sagrados o fundacionales, por encima de una interpretación
contextual. Es también la aplicación intransigente de una doctrina o práctica
establecida. Los fundamentalistas consideran un determinado libro como
autoridad máxima, ante la cual ninguna otra autoridad puede invocarse y la cual
incluso debería imponerse sobre las leyes de las sociedades democráticas.
Se trata, en resumidas
cuentas, de llevar al extremo una idea dictada por un líder. Atacar incluso con
violencia que puede ser mortal a quienes piensan diferente. Destruirlos en su
fama pública. Descalificarlos. Maniqueos, ellos son buenos. El resto, los
malos, deben morir. En ésta esfera caben nuevos grupos de fanáticos que usan el
odio y la muerte como arma de intimidación.
Boko Haram es considerado
una organización que apoya abiertamente el terrorismo contra la población civil
y usa medios violentos y coactivos en la persecución de sus objetivos
político-religiosos.
En 2013 protagonizaron
varios ataques a centros educativos de Nigeria, dejando numerosas víctimas
mortales.
En 2014 Boko Haram asesina
y quema vivos a cerca de 60 estudiantes en una escuela cristiana, ese mismo año
el grupo islamista tomó el control de una población Bama, al norte de Nigeria,
en un ataque que causó miles de desplazados y dejó víctimas fatales.
El 14 de abril
secuestraron más de doscientas niñas de una escuela en Jibik como parte de una
campaña política en contra de la educación occidental de los estados de Borno,
Yobe y Adamawa. De ellas, 53 niñas pudieron escapar en los días subsiguientes
al secuestro. Todas las escuelas en el estado de Borno fueron cerradas.
El 5 de mayo, el líder del
grupo, Abubakar Shekau, reivindicó el secuestro a través de un video donde
afirma que las venderá en el mercado y que la educación occidental debe cesar.
Una niña raptada en un secuestro anterior, y que pudo escapar, cuenta que las
cautivas eran violadas varias veces por día y forzadas a convertirse al islam,
y que les cortaban la garganta si no lo hacían.
Aún hay algo peor. El
Estado Islámico es un Estado dentro de otro Estado. Se hacen llamar califato y
su líder se hace llamar Ibrahim. El
“califato” reclama la autoridad religiosa sobre todos los musulmanes del mundo,
y tiene como objetivo declarado unir todas las regiones habitadas por
musulmanes bajo su control, comenzando con Irak y la región del Levante
mediterráneo, que cubre aproximadamente los actuales Estados de Siria,
Jordania, Israel, Palestina, Líbano, Chipre, y parte del sur de Turquía.
El Estado Islámico es
responsable de ejecutar y decapitar a periodistas occidentales. Su último
atentado es contra dos japoneses a quienes amenaza cortarles la cabeza si no les entregan una
fuerte suma de dinero. Son terroristas, pues.
TERRORISTAS
GUERRERENSES
El 13 de diciembre del
2014, sesenta periodistas, acompañados de sus esposas e hijos, acudieron a
Tlapa de Comonfort. Entregaron los premios estatales de periodismo de Guerrero.
La zona, al estilo del estado Islámico o Boko Haram, esta bajo el control de
personajes desquiciados que dicen ser la dirigencia del Movimiento Popular
Guerrerense.
Presumen que son camaradas
y correligionarios de personajes como Félix Salgado Macedonio, Ranferi
Hernández, Eloy Cisneros y “todos los que han abandonado al corrupto PRD y se
alinean con el MORENA”, como dijo el
cabecilla cuando tuvo, en el piso, secuestrados y humillados a periodistas de
Guerrero.
Les acusaron del delito de
reunirse. Les condenaron a ser golpeados, humillados, secuestrados, pedir
perdón a la turba y pagar un rescate.
Apenas el martes 20 de
enero en la misma región, fueron sacados de una casa lejana a Tlapa de
Comonfort, donde sesionaban en secreto, 20 funcionarios del INE y Consejeros
Electorales del distrito 5. Muy parecida la estrategia usada con los
periodistas. Los llevaron a la plaza pública donde les exigieron firmar
documentos donde renuncian a su calidad de consejeros y se suman a su Movimiento
Popular Guerrerense.
Cuentan con un aparato de
propaganda. Su jefa de prensa, Carmen González, es además consejera electoral.
En el caso de los periodistas secuestrados ella escribió para el periódico para
el que trabaja el mismo texto que los terroristas pretendían leyesen los
periodistas a manera de perdón a la turba. El mismo texto. La misma mentira
convertida en verdad absoluta.
En el caso de los
consejeros electorales hay sospechas fundadas de que fue ella quien dio aviso a los
terroristas del MPG del lugar donde se reunían los consejeros y funcionarios
del INE. A Dios pedimos que no haya sido asi.
También el martes 20 de
enero, en un kínder de Chilpancingo apareció una cartulina: “aténganse a las
consecuencias si abren la escuela”. Fueron los embozados quienes amenazan de
muerte a padres de familia y maestros que no piensan como ellos.
Ni qué decir de la gran
cantidad de ocasiones que han destruido la Cámara Local de Diputados, las sedes
de los partidos políticos y oficinas de gobierno en Chilpancingo. Terror puro.
La práctica del terror en
contra de los guerrerenses comenzó como el adoctrinamiento fascista, maoista o
social cubano para acercarse peligrosamente a las prácticas de Pol, Pot de
Campuchea y ha comenzado a degenerar a las actitudes de cerrar escuelas y
secuestrar ciudadanos como Boko Haram y pedir grandes cantidades por saquear,
secuestrar y controlar territorios por encima del Estado, como hace el estado
islámico.
SU
REALIDAD
Las cifras que proporcionó
la Secretaría de Educación el domingo por la tarde quitan la capucha a los
fundamentalistas. Poco mas de 115 mil plazas de jubilados o muertos aun
aparecen en la nómina. Alguien cobra ese dinero. El sistema de pensiones de
entidades como Guerrero estallará al mediano plazo debido a la gran cantidad de
comisionados y venta de plazas que hacen los organismos gremiales. Miles de
niños se quedan sin estudios por culpa de maestros que prefieren la pelea
callejera y la destrucción de su entorno a pararse frente a un pizarrón. Su
realidad es que les han quitado el negocio y responden con terrorismo en contra
de la población.
La complicidad del
gobierno estatal que sostuvo en medios que “los policías comunitarios pueden
retener y pedir rescate a manera de fianza y que eso no es un delito”. O decir
que Nestora Salgado, secuestradora hallada culpable y señalada por cincuenta
víctimas, es inocente y una luchadora social, nos lleva a una triste realidad:
falta poco, muy poco, para que con la cobardía del gobierno los terroristas de
la CETEG y MPG comiencen a asesinar ciudadanos. No estamos lejos.
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