Aunque
no descartó la posibilidad de buscar la candidatura a gobernador en 2021, el
senador Manuel Añorve Baños se pronunció a favor de que el PRI construya
una alianza con el PRD, el PAN, Movimiento Ciudadano y el PVEM para enfrentar a
Morena.
Además,
aseguró que él no será quien adelante la sucesión en el PRI, ya que ‘el 2021
está lejos’.
“No
por mucho madrugar amanece más temprano, se trata de tiempos y circunstancias,
ya vendrán los tiempos electorales”, dijo ante miembros del
“Grupo Cuicalli”, en Chilpancingo.
El
encuentro se llevó a cabo la mañana del miércoles 25 y con un grupo reducido de
socios y reporteros, en donde abordó diversos temas, especialmente lo
relacionado a su trabajo en la Cámara Alta, la ruta del PRI, el desempeño del
presidente Andrés Manuel López Obrador y su relación de amistad con Nestora Salgado García y Félix
Salgado Macedonio, senadores de Morena y aspirantes a la Gubernatura.
Como
senador de la República, Manuel Añorve
ha criticado las políticas públicas implementadas por el presidente López
Obrador y ha condenado los recortes que el gobierno de la Cuarta
Transformación ha realizado con el presupuesto del estado de Guerrero.
E
insiste en que Jorge Gage Francois, coordinador del Programa Nacional de
Fertilizantes, comparezca en el Senado por la entrega tardía del insumo y
propiciar que miles de productores guerrerenses se quedaran sin sembrar en esta
temporada de lluvias.
El
‘Chaparrito cabrón’, así se autonombra desde 2010, sí se está moviendo rumbo a
la elección de 2021. Públicamente podrá decir que no piensa ser candidato de su
partido a la Gubernatura, pero es evidente que todos los días trabaja en esa
ruta.
Desde
hace dos décadas sueña llegar a Casa Guerrero y despachar en el Palacio de
Gobierno.
¿Quién
es Manuel Añorve Baños?
Nació
el 15 de mayo de 1957 en Ometepec (Costa Chica), pero registrado en
Chilpancingo. Hijo de Manuel Añorve López y de María Julia Gregoria Baños
Torres.
Sus
estudios profesionales los realizó en la Universidad Nacional Autónoma de
México (UNAM), en donde obtuvo la Licenciatura, la Maestría y el Doctorado en
Derecho.
Desde
muy joven milita en el PRI y ha desempeñado importantes responsabilidades en la
administración pública municipal, estatal y federal.
En
1993 fue electo síndico procurador del Ayuntamiento de Acapulco, que encabezó
el alcalde figueroísta Rogelio de la O Almazán. Posteriormente solicita licencia
al cargo y es nombrado director general de la Comisión de Agua Potable y
Alcantarillado de Acapulco (Capama).
En
1996 y luego de la caída de Rubén Figueroa Alcocer del poder, es designado
secretario de Finanzas y Administración por su primo y mentor político, Ángel
Aguirre Rivero. Y en octubre de 1997, el Congreso del estado lo nombró
presidente municipal interino de Acapulco, luego de que Juan Salgado Tenorio
fuera acusado de actuar con negligencia durante el paso del huracán Paulina
en el puerto.
Manuel
Añorve no se conformó con ser alcalde del municipio más grande e importante del
estado. En 1998 se registró en el proceso interno del PRI para elegir candidato
a gobernador. Contó con el apoyo del gobernador Ángel Aguirre, pero el grupo
del ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer se movilizó mejor e hizo ganar a su
gallo: René Juárez Cisneros.
En
la elección local de octubre de 1999 contendió por una diputación y ganó. Fue
electo para el periodo 1999-2002 y formó parte de la LVI Legislatura, pero no
duró ni un año.
En
las elecciones del año 2000 participa en la campaña presidencial de Francisco
Labastida Ochoa y logra ser incluido en la lista de diputados federales por
el principio de representación proporcional.
Labastida
perdió la elección y por primera vez hubo alternancia en el país. Y Añorve
logró sobrevivir políticamente y a relacionarse con importantes personajes de
talla nacional en la LVIII Legislatura.
En
la elección de gobernador de 2005 fue coordinador de campaña de su amigo, el
senador Héctor Astudillo Flores, con resultados adversos para el tricolor.
El candidato de la coalición “Guerrero será mejor" (PRD-PRS-Convergencia),
Zeferino Torreblanca Galindo, fue electo gobernador para el periodo
2005-2011.
En
2006, Añorve fue invitado por Manlio Fabio Beltrones Rivera para fungir
como coordinador de asesores de la fracción parlamentaria del PRI en el Senado
de la República y asesor de la Junta de Coordinación Política (Jucopo).
Desde entonces fortaleció su amistad con el político sonorense y empezó a distanciarse
políticamente de su primo Ángel Aguirre.
Dos
años después (2008) fue postulado como candidato del PRI a la Alcaldía de
Acapulco. Fue una elección complicada, pero el ‘Chaparrito cabrón’ supo
aprovechar la división de las izquierdas e hizo regresar al PRI a importantes
liderazgos que en 2006 se habían ido al proyecto lopezobradorista.
2011:
LA RUPTURA.- Manuel Añorve aprovechó su segundo periodo como
alcalde porteño para posicionar su imagen con miras a la elección de gobernador
de 2011. Los fines de semana los dedicó para visitar municipios estratégicos y
armar su estructura con miembros del grupo aguirrista, al que todavía
pertenecía en ese entonces.
Ángel
Aguirre Rivero era senador de la República y estaba muy ocupado en la poderosa
Comisión que presidía: la de Comunicaciones y Transportes. Aunque era un
secreto a voces que quería nuevamente ser gobernador de Guerrero, pero a través
del voto popular.
Desde
luego que Aguirre analizaba los movimientos de su amigo, primo y cuadro
político, cometiendo el error de subestimarlo. Lo
dejó crecer, a tal grado que Añorve consiguió el apoyo de los ex gobernadores
Rubén Figueroa y René Juárez, así como del ex senador Héctor Astudillo, quienes
presionaron a la dirigencia nacional para impedir que Aguirre fuera nuevamente
gobernador.
La
amistad entre Aguirre y el entonces gobernador del Estado de México, Enrique
Peña Nieto, no funcionó para evitar que Beatriz Paredes eligiera el 6 de agosto
de 2010 a Añorve como el candidato a la Gubernatura.
Aguirre
decidió días después renunciar al PRI. No se fue solo y partió al priismo en
dos.
El
PRD, Convergencia y el PT lo postularon como su candidato y el 30 de enero de
2011 aplastaronal PRI en las urnas.
¿LA
TERCERA SERÁ LA VENCIDA?.- Luego de los trágicos hechos de Iguala
(26 y 27 de septiembre de 2014) y ante el desgaste del PRD en el poder, Añorve
nuevamente levantó la mano para ser considerado candidato de su partido. No lo
consiguió. Héctor Astudillo fue el ungido. Al "Chaparrito cabrón" no
le quedó de otra que cuadrarse y apoyar a su amigo.
Astudillo
ganó la elección del 7 de junio de 2015. Y Añorve fue parte de ese triunfo. De
hecho, gente cercana a él comenta en corto que el gobernador está en deuda con
el ‘Chaparrito cabrón’ y que en la elección de 2021 tendrá que reflejarse ‘ese
apoyo’.
2021:
LA ÚLTIMA OPORTUNIDAD
A
menos de dos años de que los guerrerenses elijan al sucesor de Astudillo,
Añorve vuelve a la escena y aunque diga o asegure que 'falta mucho para el
2021', se está moviendo. Y no le importa arrastrar bastantes
negativos.
Su
paso por la Alcaldía porteña y por la Capama, dejaron mucho qué desear. La
sombra de la corrupción lo persigue, a pesar de que nadie le ha podido
comprobar ninguna irregularidad financiera.
Además,
está consciente que después de que el PRI perdiera la Presidencia de la
República por el pésimo gobierno de Enrique Peña Nieto, las condiciones no le
son favorables a su partido.
Lo
bueno de todo es que el dos veces ex alcalde de Acapulco es optimista y ha
aprendido ser calculador, aunque eso no le garantice ganar una elección
constitucional, ya que a veces gana perdiendo.
A
ver qué tal le va en su cuarto intento.
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