En entrega anterior
tome un breve ejemplo de Los empeños de
una casa de Sor Juana, y una vez contemplado el proteccionismo a las
esposas de los gobernadores corruptos con excepción de la pareja de Iguala
integrada por María de los Ángeles Pineda Villa y José Luis Abarca, ambos
presos, pero sin tocarles un pelo a numerosos bienes que suman millones de
pesos producto de dinero ilegal, en la historia contemporánea, ninguna de las
esposas de ex gobernadores, secretarios de estado, han sido tocadas.
William Shakespeare en
su obra Macbeth se introduce en el bajo mundo de las pasiones humanas,
ambiciones sin escrúpulos, remordimientos desmedidos que tienen como meta
alcanzar el poder como objetivo de un matrimonio, pero que a diferencia de las
Macbeth mexicanas, en la obra, este remordimiento por lo realizado los
enloquece y persigue; a las mexicanas, no.
El Hado le avisa a Lady
Macbeth lo que se les vendrá encima. No así a las mexicanas, que pese y a sabiendas
de que sus esposos han cometido delitos, siguen tan campantes como si nada les
moviera el piso.
A diferencia de la obra
donde los sobrenatural se liga con la realidad y la envuelve; en la
tragicomedia mexicana, no hay la introspección que se da en la obra de teatro:
“quéjate, grita, que el dolor que no
llora en los ojos, ruge en el corazón y lo destroza”.
En qué y como gastarían el dinero mal
habido las esposas de Mario Villanueva, Tomás Yarrington, Eugenio Hernández, Roberto
Borge, los hermanos Moreira, Javier Duarte Jáquez, Medina, Granier, Moreno
Valle, Juan Sabines, Guillermo Padrés Elías y una gran lista de etcéteras?
Y la esposa de Alfredo del Mazo Maza ¿qué
le tocó? que durante su estancia en BANOBRAS, en dos años, gastó “2 mil 605 millones 810
mil 431 pesos en juicios de demandas, fiestas de día de muertos, publicidad,
uniformes, regalos, software, deportes, autos deportivos, maestros de boliche,
yoga y ajedrez, camionetas, árboles de navidad, cortinas y renta de
instalaciones, de acuerdo con los 889 contratos públicos disponibles en el POT…”.
Y en medio de todo, aspira a gobernar el Estado de México que tiene 8
millones 269 mil habitantes en extrema pobreza.
Del
Mazo Maza ¿le seguirá dando vuelo al erario junto con su esposa, familia y amigos
como Armando Hinojosa Cantú gastando como rey el presupuesto mexiquense, y en
Morelos Graco Ramírez y Elena Cepeda que han conformado un gobierno de virreyes
en la tierra de Zapata beneficiando a hijos, medios hermanos y a toda una
garulla familiar que han mudado a Morelos en su principado gracias a la
impunidad del que hace gala y presume el gobernador de esa entidad?
Pero la joya de
la corona macbethiana es sin duda, Karime Macías Tobilla, esposa de Javier
Duarte de Ochoa. La poderosa señora fue o es operadora de una red que incluía,
según medios nacionales creíbles a 34 personas ligadas a su familia que se
encargaron de cometer atropellos sin medida al erario de Veracruz. Crearon
empresas fantasmas, lavaron dinero destinado a obra pública en otras empresas
inexistentes, colocaron el presupuesto del DIF estatal en la bolsa Cristian Dior que Karime resguarda en un
banco de Londres con otra identidad, la de su cuñado.
Pese a los
señalamiento y al simple sentido común, la Macbeth jarocha se ha ido al exilio
a Londres sin que se le finque ninguna responsabilidad.
¿Quién está
detrás de no tocar a las esposas? ¿Es un pacto antes de entregarse, o una línea
oficial?
Hasta el momento
los trascendidos son de que en verdad hay un pacto en lo oscuro.
Entonces, ¿por
qué está en la cárcel María de los Ángeles Pineda Villa, esposa de José Luis
Abarca?, quien era la operadora al igual que la esposa de Javier Duarte de
Ochoa de la red de corrupción que tiene en jaque y endeudado al pueblo de
Veracruz.
Este no es un
asunto de género es un tema toral para la buena marcha de la republica.
Concubinas,
amantes, esposas y “amantos” de virreyes, dictadores, presidentes, pese al
patriarcado entronizado en el poder, han
jugado en ocasiones un papel secundario o estelar.
Las Macbeth
mexicanas, dejaron de ser las mujeres, atentas, sumisas y agradecidas para
convertirse en el alter ego del marido y en las que realmente llevaron o llevan
las riendas de un gobierno siguiendo los lineamientos de Lady Macbeth.
Mientras no se le
finque responsabilidad a Karime Macías Tobilla, que a todas luces es el cerebro
de la corrupción en Veracruz, el espectro de Lady Macbeth, se cierne sobre
actuales futuras parejas que aspiran a ejercer el poder sin escrúpulos, por
sobre cualquier norma ética y para su beneficio. O como fue el caso excepcional
de Elba Esther Gordillo Morales, una Macbeth solitaria que pese a estar en la
cárcel, no le han tocado ni un pelo a su millonaria fortuna producto de favores
electorales y las cuota de los maestros de México.
Y una pregunta
que es necesaria, los hijos de las Lady Macbeth mexicanas como Martha Sahagún a
que clase de ética se ceñirán en el futuro de llegar a ocupar una
responsabilidad en el gobierno o un cargo de elección popular?
Hay hijos de
políticos herederos de sus padres metidos hasta el hueso en la corrupción. ¿Lograran
sortear a la justicia y convertirse en gobernantes, como la consigna patriarcal
y política de los nuevos caciques de oriflama y esplendor marca Lady Macbeth?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.