*El doctor Carlos De la Peña participó en foro en la Cámara Federal de Diputados
Ciudad de México, 26 de febrero 2020.- Al participar en el foro “La Mortalidad Materna en México, un enfoque basado en evidencia científica”, el Secretario de Salud de Guerrero, Carlos De la Peña Pintos, destacó que para avanzar en la reducción de este problema y alcanzar las metas internacionales del Objetivo de Desarrollo Sostenible, se deben atender los determinantes sociales, que tienen que ver con el contexto socioeconómico de la población, con énfasis en el nivel educativo, la condición de afiliación al sistema de salud, así como el origen étnico de la madre. Además, señaló la importancia de contar con parteras tradicionales mediante creación de plazas del INSABI, quienes mostraron una gran fortaleza en la atención de las embarazadas en el estado de Guerrero.
El funcionario participó con el tema “Perspectivas actuales de la Mortalidad Materna en el Estado de Guerrero”, en este foro organizado por la Comisión legislativa de Derechos Humanos, que preside el diputado Hugo Rafael Ruiz Lustre, en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.
En su exposición, el doctor De la Peña Pintos, señaló que, en 2018, el estado registró el mínimo histórico en la Razón de Mortalidad Materna (RMM) con 33.1 por 100 mil nacidos vivos, ligeramente inferior al promedio nacional 33.4. Además, detalló que el mayor número de casos de muertes maternas se debe a hemorragias y enfermedades hipertensivas.
En cuanto a la distribución de las muertes maternas por jurisdicción sanitaria, dijo que la Montaña concentró el mayor número de casos entre 2016-2019 mientras que en Costa Grande se registran el menor número de casos.
También, mencionó que el riesgo de morir asociado a la población hablante de lengua originaria en Guerrero es de tres veces mayor que las que declaran no ser hablante de alguna lengua originaria. En cuanto a RMM según el sitio de ocurrencia, el funcionario mencionó que en Guerrero, el riesgo de morir por una causa materna fuera de unidad médica es 14.5 veces mayor que dentro de ella.
Indicó que el riesgo de muerte materna es mucho mayor en población sin ningún tipo de afiliación que las que se encuentran afiliadas en el sector salud.
Destacó que la administración del Gobernador Héctor Astudillo Flores aplica varias estrategias para abatir la mortalidad materna en Guerrero, basada, primero, en acciones comunitarias en primer nivel de atención, y segundo, acciones enfocadas en unidades hospitalarias y oficinas centrales.
En las estrategias comunitarias se ubican el fortalecimiento de la parto humanizado, intercultural y seguro en Guerrero, la partería tradicional e intercambio de saberes; el traslado seguro; la prevención de embarazos en los adolescentes, los servicios amigables; la contratación de parteras técnicas tradicionales; las posadas y vehículos para Atención a la Mujer Embarazada (AME); así como la difusión en idiomas originarios.
Las estrategias en hospitales y nivel central consisten en el fortalecimiento de equipo de obstetricia crítica; la integración de equipos de respuesta inmediata; las sesiones del Comité de Prevención, Estudio y Seguimiento de la Morbilidad y Mortalidad Materna y Perinatal (CPESMMMYP); las sesiones virtuales de seguimiento de embarazadas y puérperas; el chat obstétrico; la capacitación continua; vinculación interinstitucional y la supervisión estatal integral.
El titular de Salud agregó que para reducir la meta de mortalidad materna se requiere reforzar la consejería de preconcepción en grupos vulnerables, impulsar la participación de redes con la participación de los tres órdenes de gobierno y el apoyo de las parteras tradicionales; aumentar las salas de parto humanizado con un enfoque intercultural y de irrestricto respeto a los derechos humanos; contar con más ambulancias para traslados seguros e impulsar firmas de convenios con los ayuntamientos y dependencias afines del gobierno federal.
Además, ampliar las capacidades y oportunidades de la mujer para ejercer su derecho a cursar con un embarazo saludable, un parto seguro y un puerperio sin complicaciones y proteger el derecho a la salud del recién nacido.
