Hace tres años intentó ser candidato del PRI a la Alcaldía de Acapulco. No tuvo éxito. Y se fue echando pestes.
Contribuyó al triunfo del candidato del PRD y estableció fuertes compromisos. ¿De qué tipo? Sólo él y el actual edil porteño lo saben.
De hecho, antes de que su amigo Evodio Velázquez Aguirre decidiera renunciar a la búsqueda de la reelección, le había ofrecido nuevamente su apoyo. Pero ya había empezado a moverse en las colonias y localidades del municipio para crear su propia estructura.
En efecto, me refiero al ex diputado local y federal, Rubén Figueroa Smutny, quien ya fue declarado candidato del Partido Nueva Alianza (Panal) para contender por la Presidencia Municipal de Acapulco.
El vástago del ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer trae su propia estrategia. Ya no se confronta tanto en las redes sociales. Tal vez entendió que eso le resta seriedad ante la opinión pública.
Hay quienes no le ven posibilidades de triunfo y que su participación en la contienda es para restarle votos al PRI.
Y aunque no nació en Acapulco, sino en Huitzuco de los Figueroa (13 de abril de 1967), ha vivido durante mucho tiempo en el puerto, en donde ha establecido fuertes relaciones con dirigentes partidistas y miembros de la sociedad civil.
Su principal adversario es el ex alcalde de Acapulco y actual candidato a senador por el PRI, Manuel Añorve Baños, con quien ha protagonizado serios desencuentros.
El jueves 8, por ejemplo, se reunió con el diputado federal y dirigente de Grupo Guerrero, David Jiménez Rumbo, a quien invitó a sumarse a su proyecto, luego de que el PRD diera a conocer a Joaquín Badillo Escamilla como su abanderado en el puerto.
Es empresario del ramo del transporte y ha ocupado diversos cargos en la iniciativa privada.
Y aunque es postulado por un partido con escasa estructura, Figueroa Smutny está decidido en ganarle al PRI y al PRD con los votos de priistas y perredistas inconformes.
A diferencia de Ricardo Mejía Berdeja, de Movimiento Ciudadano, al cachorro de don Rubén Figueroa Alcocer no le pueden imputar que haya vendido al portal sueco buscardatos.com el padrón electoral que se usó en las elecciones del 2012 y que haya sido multado por el Instituto Nacional Electoral (INE).
Con los que también se ha reunido son Marco Antonio Terán Porcayo y Víctor Manuel Jorrín Lozano, ex candidatos a la Alcaldía por el PRI y Movimiento Ciudadano, respectivamente.
Mientras Morena no decide quién será su candidato o candidata, Figueroa Smutny se mueve sin tanto problema; es más, se habla que ya “compró” la franquicia del Panal en Guerrero. ¡Zas!
ENTRE OTRAS COSAS… El gobernador Héctor Astudillo Flores instaló este martes la mesa por la seguridad electoral, que tiene como objetivo diseñar e implementar los mecanismos de coordinación con partidos políticos y candidatos, a efecto de garantizar que el proceso electoral se desarrolle en las mejores condiciones.
La competencia se pondrá interesante en Acapulco y, sobre todo, porque el PRD se encamina para perder.
La candidatura de Jacko Badillo también beneficia a Figueroa de manera indirecta, pues los evodistas le regresarían el favor al huitzuquense, dicen, dicen.
En el evento realizado en Casa Guerrero estuvieron presentes el secretario de Seguridad Pública, Pedro Almazán Cervantes; los presidentes de los Comités Ejecutivos Estatales del PAN, Marco Antonio Maganda Villalba; del PRI, Heriberto Huicochea Vázquez; del PRD, Ricardo Barrientos Ríos; el secretario general del PVEM, Arturo Álvarez Angli; el comisionado del PT en Guerrero, Victoriano Wences Real; la presidenta del Comité de Dirección Estatal de Nueva Alianza, Laura Elizabeth Pineda Manzano; el coordinador de la Comisión Operativa Estatal de Movimiento Ciudadano, Luis Walton Aburto y el presidente estatal del Partido Encuentro Social, Jorge Domínguez Salgado.
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