En la práctica diaria de
conductas que amplían nuestras oportunidades de desarrollarnos
profesionalmente, debemos incluir los buenos hábitos de salud, los cuales no
implican necesariamente el uso de medicinas ni constantes visitas al médico.
La salud es un concepto que
integra muchas variables. Interpretarla solamente como ausencia de enfermedad
no nos ayuda a entender el valor de las prevenciones cotidianas que podemos
realizar para alcanzarla.
Es bueno no dar por obvio
que se trata de una condición indispensable para nuestro desempeño laboral y
personal: una buena salud nos proporciona energía, entusiasmo y seguridad en
nosotros mismos.
Salud
al trabajar con la computadora
En muchos trabajos estamos
expuestos al uso continuo de la computadora. Esta actividad puede generar
varios problemas si no tenemos hábitos correctos al realizarla.
Sentarse de manera
incorrecta, puede acarrear fatiga ocular, fatiga física o el síndrome del túnel
carpiano. Y todo esto, en términos prácticos, se traduce en:
• Dolor de cabeza.
• Irritación en los ojos.
• Visión borrosa.
• Dificultad para enfocar.
• Visión doble.
• Problemas para ver a larga
distancia.
• Cambio en la percepción de
los colores.
• Dolor de espalda, cuello,
hombros, manos y brazos.
• Sensación de calor,
fatiga, hinchazón, calambres y entumecimiento.
Diez
soluciones gratuitas y sencillas
A veces tenemos paradigmas
sobre la salud demasiados complejos y no nos damos cuenta de que tenemos a mano
acciones inmediatas que protegen y mejoran nuestro bienestar.
Para prevenir las
consecuencias negativas de un uso inadecuado del computador debemos:
1. Disminuir la saturación
de los colores en el monitor.
2. Ajustar el brillo para
que sea similar al del ambiente donde estamos.
3. Trabajar los textos en color
negro sobre fondo blanco.
4. Tomar descansos cada 30
minutos para relajarnos.
5. Parpadear constantemente.
6. Realizar movimientos
lentos y circulares de manos, cuello, muñecas, tobillos y hombros.
7. Extender los brazos,
apretar los pulgares con los demás dedos y mover las muñecas hacia abajo (10
segundos).
8. Extender los brazos con
los dedos abiertos y apuntando hacia abajo, apoyar las manos contra una pared y
empujar suavemente.
9. Extender los brazos,
abrir las manos y estirar (10 segundos), después cerrar los puños y mover las
muñecas hacia abajo (10 segundos).
10. Mantener una postura
correcta frente al computador: rodillas ubicadas debajo de la cadera; pantalla
ubicada frente a los ojos y pies en el piso delante de la silla. Los brazos
deben hacer un ángulo de 90 grados respecto a la mesa o escritorio.
Amplía
tus oportunidades de más salud
La práctica cotidiana de
hábitos de vida saludable va desde una alimentación balanceada, variada y
suficiente, hasta la realización frecuente de actividad física.
También incluye cuidar la
calidad del ambiente en el que nos desenvolvemos, buenos hábitos de higiene,
orden y planificación personal, y cultivar relaciones personales significativas
y satisfactorias.
Una buena salud también es
una decisión personal. Existen muchas maneras de mantener un estado físico que
nos permita llevar adelante nuestras metas de superación personal y con ello
ampliar nuestras oportunidades de avanzar y progresar.
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