CÓMO EVITAR QUE LOS OJOS “SE CANSEN” DESPUÉS DE UN DÍA ENTERO VIENDO PANTALLAS

La exposición ocular a dispositivos luminosos puede causar efectos desastrosos. Si pasas buena parte de tu día con los ojos sobre un dispositivo luminoso (computadora, celular o incluso la televisión), debes saber que tu salud ocular está en peligro.

Un estudio reciente de The Vision Council sugiere que el 68% de la generación de los millennials (nacidos después de la década de 1990) sufre efectos de “tensión en los ojos” provocados por los dispositivos digitales.

Varios factores pueden causar tensión ocular, pero la principal causa es la exposición a dispositivos que emiten luz. Estamos de acuerdo en que nuestras interacciones con estos objetos son cada vez más naturales – ¿o acaso logras pasar más de un día sin ver tu celular o la televisión?

Síntomas y causas.

Los síntomas de la versión digital de tensión ocular son incomodidad en los ojos, ojos rojos, resequedad e irritación. Además de la fatiga ocular, visión borrosa, lagrimeo y dolor de cabeza.

Esto sucede porqué parpadeamos menos cuando vemos una pantalla, lo que lleva a la resequedad e irritación de los ojos. La luz azul emitida por los monitores digitales también aumenta la tensión ocular – y el The Vision Council informa que la exposición acumulativa y constante a esta luz puede dañar las células en la retina.

Evitando la tensión.

La forma más simple (y obvia) para evitar la tensión ocular digital es hacer pausas y retirar la vista de las pantallas. Sin embargo, las indicaciones sobre cuántas veces se deben hacer estas pausas en caso de exposición de los ojos difieren.

The Vision Council defiende una pausa de 20 segundos cada 20 minutos. Mientras que el Ministerio del Trabajo de Canadá sugiere una pausa de cinco minutos por cada hora de operación en la computadora.

Otra recomendación es ajustar las configuraciones de brillo en el celular, televisión y computadora. Esto ayudará a que tus ojos hagan menos esfuerzo cuando estés leyendo algo. La iluminación a tu alrededor también cuenta mucho. Asegúrate de que el brillo en la pantalla no es mayor que los niveles de la luz en el ambiente. Si los síntomas persisten, lo mejor que puedes hacer es consultar al oftalmólogo.