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| MOISÉS SÁNCHEZ LIMÓN |
A quienes arrían banderas
ideológicas y andan de partido en partido en busca del ascenso, el hueso y el
estrellato no conseguido en su primer espacio de nacencia en la política
azteca, de pronto los han identificado como “Chapulines”, un eufemismo para calificar
esa inestabilidad, porque finalmente tener carios cargos registrados en la
carta curricular no necesariamente implica experiencia.
“Chapulines”, suena menos
fuerte porque coloquialmente usamos el adjetivo chaquetero con carácter
peyorativo que acusa traición. No es sinónimo pero cómo se parece, porque
chaquetero es aplicable a quien cambia de ideas, especialmente políticas, por
intereses propios, de acuerdo con la definición del tumbaburros.
No es raro, mas sí
deleznable que alguien cambie de bando y traicione a un ideal político por
intereses bastardos. Porque sólo quien carece de convicciones y escrúpulos y se
presta a una mascarada, generalmente bien retribuida económica y políticamente,
traiciona a un grupo, un ideal. Ese es un chaquetero; o chaquetera.
Tal es el caso –de otra
forma desmiéntame, por favor—del ya no tan joven Christian Pulido Roldán, quien
vísperas de celebrarse la elección de gobernador, alcaldes, regidores y
diputados locales en Hidalgo, se pasó al bando contrario.
Era delegado estatal de
Movimiento Ciudadano y, el martes pasado (31 de mayo), decidió apoyar
públicamente a Omar Fayad Meneses, candidato del PRI al gobierno del estado de
Hidalgo. Pero, más allá de esa decisión que en automático implica renunciar al
partido que lo arropó cuando se cansó de medrar en el Partido Verde Ecologista
de México, desconoció a los candidatos del partido naranja y que son de
extracción universitaria, a quienes quiso descalificar burdamente, como aquel
que se va de casa y patea al pesebre. Vaya, vaya.
No conozco a Pulido
Roldán. Escribo desde la ciudad de México, pero como reportero con más de
cuatro décadas de andar en estos menesteres, he conocido a personajes como el
licenciado Christian. Personajes que chaquetean a un equipo de trabajo que los
encumbró y que rara vez llegan a brillar porque la máxima acusa: el que
traiciona una vez, traiciona dos. Christian va en la segunda y no creo, salvo
una extrema necesidad, que Omar Fayad vaya a considerarlo en un cargo de alta
responsabilidad.
Porque, mire usted, como
suele ocurrir con estos personajes, cuando llegan a un nuevo espacio se
acomodan y lisonjean a sus líderes y patrones, a quienes en la ruta de
traicionarlos acusan de todo y se tornan infidentes. ¿Alguien volverá a creer
en el licenciado Christian?
Habló lindezas de Gerardo
Sosa Castelán y de quienes lo arroparon, dejó bajo sospecha el manejo de
dineros públicos y desconoció a candidatos de extracción universitaria
calificándolos de impuestos, entre ellos a Antonio Mota Rosas, nominado de
Movimiento Ciudadano a presidente municipal de Pachuca.
Si Omar convenció a Pulido
para sumarse a su causa, bien por él. Pero sin duda Omar no lo invitó
personalmente ni habrá de tener confianza absoluta a este personaje, a quien
ipso facto desconoció la dirigencia nacional de Movimiento Ciudadano.
Juan Ignacio Samperio, delegado nacional de
Movimiento Ciudadano en Hidalgo, reiteró a las y los habitantes de Hidalgo que
la Comisión Operativa Nacional de este órgano político confirma apoyo total a
sus candidatos, especialmente a Antonio Mota y Antonio Hernández, ambos
aspirantes a las presidencias municipales de Pachuca y Tulancingo
respectivamente, así como a Damián Sosa, candidato a diputado local por el
distrito XI con cabecera en Tulancingo.
En conferencia de prensa,
a la que asistieron Alejandro Chanona Burguete, integrante de la Comisión
Operativa Nacional y presidente de la Fundación Lázaro Cárdenas, así como César
Severiano González Martínez, integrante de la Comisión Nacional de Estrategia
Electoral, Samperio aseveró que en todas las entidades donde se llevarán a cabo
elecciones el próximo 5 de junio esta organización política participará de
forma directa sin coaliciones ni alianzas con los partidos de siempre.
Pero, sin citarlo
formalmente, Christian está fuera de Movimiento Ciudadano. Quien traiciona una
vez, traiciona dos. Chaquetero es el adjetivo.
Y sigue en esa ruta de
otros próceres que chaquetearon por razones que sólo ellos saben, porque en
asuntos de ideología y convicciones hay quienes han aprendido a comer sapos y
esperar su momento. Plausible, sin duda, cuando las traiciones y los usos y
costumbres son factor para buscar otros ámbitos de desarrollo político.
Mas no pueden ser
plausibles grandes chaqueteros como Miguel Ángel Yunes Linares, Ángel Heladio
Aguirre Rivero y Mario López Valdez (Malova), quienes con la investidura de
senadores de la república ungidos por el PRI renunciaron al PRI porque el PRI
no cedió a sus ambiciones personalísimas de ser gobernadores, uno por Guerrero,
otro por Sinaloa.
Ángel Heladio fue
candidato de la alianza PRD-PT-Convergencia; Malova por la alianza
PAN-PRD-Convergencia. El primero, bajo el manto de la impunidad, solicitó
licencia al cargo sin responder por el caso Iguala-Ayotzinapa; el segundo
concluye su gestión con más pena que gloria, aunque puede volver al redil
priista si acepta la invitación de Manlio Fabio Beltrones. ¡Qué tristeza!
Y, bueno, ¿se acuerda
usted de Marco Efrén Parra Gómez? Bueno, hasta el año pasado fue diputado en el
Congreso de Guerrero, después de ocupar cargos de delegado del IMSS y la
Sedesol en el gobierno de Felipe Calderón, hasta donde se sabe. Pero el 25 de
enero de 2011 saltó a la fama cuando, como candidato del PAN al gobierno de
Guerrero declinó a favor de Ángel Heladio Aguirre Rivero.
¿Sirvió de algo esa
chaquetera decisión? En la elección del 30 de enero de 2011, es decir, cinco
días después de haber declinado, en las urnas obtuvo 16 mil 81 votos, es decir,
el 1.31 por ciento de los sufragios emitidos por los guerrerenses en esa jornada
dominical en la que Ángel Heladio, que había chaqueteado del PRI, ganó con
55.92 por ciento de los votos. El próximo domingo, los nombres de varios de
estos especímenes, próceres de la polaca azteca, estarán en las boletas de la
jornada comicial. ¿Votar por chaqueteros? Allá usted y su conciencia. Conste.
JUEVES. Y comienza la ruta
de las apuestas. Hoy, legalmente, arranca la veda: nadie puede hacer campaña.
Pero júrelo, la oposición de Morena y el PRD con el PAN de la mano desplegarán
la campaña para descalificar al proceso. Digo.
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