Con la decisión del INE en torno a la candidatura de Salgado Macedonio y del candidato de Morena en Michoacán, queda demostrado que ninguna manifestación, presión política o amenaza, consiguen intimidar al árbitro electoral, cuyo surgimiento fue como IFE y ha ido adecuándose a las exigencias de los nuevos tiempos democráticos.
Recordemos que el IFE, hoy
INE, fue el primer órgano ciudadanizado y surge a exigencia de los movimientos
sociales y partidos que pedían un árbitro electoral justo, honesto y transparente.
Eso que a Morena hoy le
desagrada, y que sus candidatos y seguidores subliman con marchas y protestas,
el PRD lo sufrió durante el surgimiento del IFE, pues les costaba entender que
los tiempos habían cambiado y aunque recurrían a las tomas de los órganos
electorales, los resultados ya no se adecuaban a las presiones políticas.
Quizá eso explique el por
qué Salgado Macedonio utilice como primer recurso este tipo de presiones
sociales para hacer oír su descontento, semejante a lo que hizo antaño en el
PRD las veces que perdió electoralmente.
Recordemos que hubo casos
que los militantes del PRD con sus candidatos perdedores, enojados porque los
resultados no les favorecían, llegaron a quemar los paquetes electorales y
destruir los inmuebles que utilizaban los órganos electorales municipales, y
distritales, y muchas veces a querer ingresar al Consejo Estatal Electoral o al
IFE local.
Y ejemplos sobran, así como
los nombres de quienes los encabezaron, y varios de ellos ahora están en
Morena.
El riesgo de volver al
pasado y como sociedad atestiguar ese tipo de actos, para muchos representaría
un retroceso histórico.
Por eso urge que los
políticos terminen por entender que deben seguir la ruta legal como primer
camino y como segundo y tercero, pues ya vieron que ninguna marcha cambia las
disposiciones del órgano electoral.
Dos son los caminos que el
INE le deja a Morena: seguir la ruta legal mediante los procedimientos de
impugnación ante el Trife, o cambiar de candidato.
Para eso tiene 48 horas a
partir de la resolución emitida el día martes.
Mientras en Morena y en
corrillos políticos ya se barajan nombres del posible candidato que puede
suplir al Toro sin cerca, y los nombres más fuertes son Luis Walton, Nestora
Salgado y Evelyn Salgado, la hija de FSM.
Pero quien puede tener
mayores posibilidades es Nestora Salgado, por su papel de Senadora, fiel aliada
del presidente AMLO, y disciplinada con la 4T.
Porque a Luis Walton no
terminan de aceptarlo en Morena, por ser externo y por su pasado partidista.
“Traidor” le llaman algunos.
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