EL JUEGO PERVERSO DEL PODER CON EL DINERO DEL PUEBLO Por Gaby Carmona Astudillo

GABY CARMONA ASTUDILLO

Siempre que salen  a la luz pública hechos de malversación de fondos públicos, los responsables se van con la mano en la cintura y con millones de pesos en sus cuentas personales pero jamás autoridad alguna a actuado legalmente en su contra para que pague por sus fechorías o por lo menos regrese el dinero que se llevó.

Los casos son muchos, algunos muy escandalosos y que han sido del dominio público, pero, los responsables que planearon, tomaron, ejecutaron, se robaron, se llevaron o como se digan, renuncian a sus cargos y se van como si nada hubiera pasado, dejando a las dependencias en las que se desempeñaron con un enorme desfalco financiero.

Se supone que todas las dependencias de los tres niveles de gobierno deben actuar con estricto apego a la ley y el dinero debe ser manejado con transparencia,  eso dice la Ley, pero en los hechos,  ni hay ley que sancione los desvíos de recursos ni hay quien haga cumplir la tan mencionada transparencia.

Por ello, los funcionarios de los tres niveles de gobierno, han hecho y deshecho en el manejo de los recursos del pueblo, muchos de esos funcionarios tienen poco tiempo de haber ingresado a la administración pública, el puerto de Acapulco es un claro ejemplo de ello porque  piensan que con la mano en la cintura pueden  tomar el dinero de los acapulqueños como si fuera de ellos y ejercerlo sin ton ni son e irse tan tranquilos.

Si la renuncia del ex director de egresos del gobierno municipal de Acapulco fue por el millonario desvío de recursos ocurrido en esa dependencia, su jefe inmediato, debió no solo informar al presidente municipal y  presentar de inmediato ante la autoridad penal una denuncia de hechos en donde  quedara asentado el ilícito y con ello dejar un precedente y que la Ley hiciera lo suyo.

Pero como no ha ocurrido así, el hijo del actual director del DIF Acapulco,  renunció sin decir más, y se fue convertido en el nuevo  rico de Acapulco y vecino de políticos como Erika Lürhs, Fermín Alvarado y la abogada Josefina Verduzco, por esa misma calle en donde adquirió una residencia para la segunda de abordo y otra más para la primera  en otra sección del fraccionamiento porque ambas no pueden vivir en la misma calle, pueden cohabitar pero sería muy riesgoso.

Y ese es el mismo camino que está tomando el que funge como titular de la Dirección de Saneamiento Básico del gobierno de Luis Walton, quien está por adquirir un lote con una humilde vivienda precisamente en el fraccionamiento Joyas de Brisa Mar, al parecer el mismo lugar que le gusta a una funcionaria del sistema RTG, con quien acudió para observar y acordar el precio del citado terreno.

Sabemos de ante mano que en ambas dependencias se cuecen bien las habas, el asunto está que mientras hablan de honestidad y que no hay recursos económicos, lo cierto es que lo que entra del pago de publicidad en un caso y los contratos de la recolección de la basura en rutas especiales que pagan muy bien, pues el jugoso negocio da para adquirir ese predio y más, como mencionó la funcionaria de RTG dinero hay, cuanto vale y están por cerrar el trato, ese es el funcionario de Luis Walton, el alcalde de la honestidad y la transparencia.

Dicen que no debemos de preocuparnos porque Acapulco puede con eso y más, quizás si y una muestra de ello, es que los acapulqueños siguen pagando en sus recibos de agua, aunque el vital líquido nunca llega, los gastos excesivos de la magna fiesta que organizó el director general de CAPAMA en su natal Veracruz, hasta donde traslado a bordo de dos autobuses de lujo a todos los directores de áreas de la dependencia y a varios funcionarios municipales, claro con todos los gastos de hotel, comida y otros regalos con cargo al recibo de los acapulqueños.

Ah pero eso sí, muchas colonias de Acapulco están sin agua, pero el recibo llega puntual a los acapulqueños que tienen que pagar, el monto del presunto secuestro exprés, que no fue otra cosa una cortina de humo para cubrir los gastos de tan maravilloso evento, las fotos no mienten y las facturas tampoco.

Como transparente debe ser la explicación que debe dar el honorable Congreso Local de Diputados, el por qué los guerrerenses pagaron una semana de vacaciones a  25 legisladores locales de los diferentes partidos políticos que junto con su familia fueron hospedados en un hotel de súper lujo y se pagaron cuentas de restaurante de 300 mil pesos y la renta de vehículos a la puerta con chófer y todo incluido. Mientras el responsable de pagar a proveedores emitía cheques sin fondo. Las vacaciones arrojaron un pago millonario allá en Cancún, en donde por cierto, dos diputados vomitaron y otro se orinó en los pantalones de lo ebrio que estaban.

En el asunto de la transparencia, las oficinas de gobierno dejan mucho que desear, funcionarios que malversan recursos, funcionarios que andan en plena promoción electoral, aun sin ser los tiempos, funcionarios que descuidan sus áreas de trabajo para posicionar una imagen tan desgastadas en donde la población ya los conoce y no precisamente por sus buenos resultados. Funcionarios que son funcionarios de lunes a viernes, porque sábados y domingos se dedican a promocionar su imagen y a visitar a su gente. Funcionarios que toman dinero ajeno y no pasa nada con ellos, a eso se llama transparentar el dinero del pueblo.

Por cierto, el legislador local priista y aspirante a la presidencia municipal de Acapulco, Rubén Figueroa Smutny dijo que los empleos que está ofreciendo a los gestores sociales que le ayuden a ganar se pagaran con el mismo sueldo que tiene Luis Walton en su lista de aviadores, no anda mal el legislador, quien tiene toda la información en la mano, por lo menos en lo personal se de siete listas de varios funcionarios cercanos al alcalde y al propio alcalde, en donde hay sueldos de 40, 30, 10 y cinco mil pesos, y la lista es superior a mil 300 personas. Obvio el edil dirá que no es verdad, porque así le sale mas barato el golpe publicitario, pero no creo que se ponga con sansón a las patadas, Smutny sabe y el alcalde también.

Por lo pronto  la Ley  de transparencia sigue durmiendo el sueño de los justos, sin duda alguna, porque Acapulco puede y más.