Condena Víctor Ortíz Ensástegui al “turismo ingenieril”

>>Competencia desleal contra ingenieros mexicanos, acusa el candidato a la Presidencia del Colegio de Ingenieros Civiles de México, A.C

>>Se reúne con integrantes de asociaciones y sociedades técnicas

Contraste/Ciudad de México.- Víctor Ortíz Ensástegui condenó a lo que llamó “turismo ingenieril”, es decir, la competencia desleal de ingenieros extranjeros que ingresan a México con visa de turista pero vienen a trabajar en obras en las que desplazan a los profesionistas nacionales.

Por ello, planteó el imperativo de que los ingenieros civiles colegiados intervengan en la elaboración de políticas públicas, asuman el papel de asesor o consejo consultivo del gobierno federal en planes de trabajo y participen, con organizaciones afines, en el asesoramiento y cabildeo en el Congreso de la Unión de reformas legislativas, como sería el caso de la Ley de Adquisiciones y Obras Públicas.

“Cuando decimos ser asesores del gobierno, es decir: “aquí estamos”. Hay que alzar la voz y decir aquí estamos, cuantas veces se requiera, y pedir respetuosamente participación en programas y proyectos públicos, como en el tema del transporte ferroviario donde sale la ingeniería española desarrollándolo, pero los ingenieros mexicanos que lo hicieron aquí existen.

“Y está también lo del AICM (Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México), lo vemos pero no sabemos, por un lado, cómo estamos los ingenieros civiles (en esa obra)”, expuso Ortíz Ensástegui.

Incluso, en consonancia con la inquietud referida por el subsecretario de Relaciones Exteriores para América del Norte, Sergio Alcocer Martínez de Castro, de facilitar a las nuevas generaciones el acceso al CICM, propuso establecer un sistema de becas “que –dijo--promuevan y forjen trayectorias profesionales sólidas en beneficio de los jóvenes ingenieros y del país”.

Reunido con integrantes de asociaciones y sociedades técnicas, como la Asociación Mexicana de Ingeniería de Túneles y Obras Subterráneas, A.C., y la Sociedad Mexicana de Ingeniería Oceánica y Costera, expuso su plan de trabajo como candidato a la Presidencia del XXXV Consejo Directivo del Colegio de Ingenieros Civiles de México, A.C. (CICM) para el periodo 2014-2016, y enfatizó en la importancia de acudir a votar el próximo jueves 20 del mes en curso, en un horario de ocho de la mañana a ocho de la noche, en las instalaciones del CICM,

En la reunión participó el subsecretario Sergio Alcocer Martínez de Castro, ingeniero civil de profesión e integrante del CICM, quien ponderó la candidatura de Ortíz Ensástegui y propuso inyectar una nueva dinámica al Colegio.

“Más allá de que sea candidato único, por respeto y el aprecio que le tenemos, lo que queremos es trabajar con él en equipo”, dijo Martínez de Castro respecto del ingeniero Ortíz Ensástegui e indicó que el Colegio de Ingenieros Civiles de México debe tener una visión de prospectiva.

Y es que, explicó, por su vía otras organizaciones de ingenieros pueden trabajar en esa prospectiva, bajo la consideración de que hay que invitar a los jóvenes a participar y darles facilidades de ingreso al Colegio, postura coincidente con el plan de trabajo de Víctor Ortíz en este rubro, quien agradeció las palabras del subsecretario.

“Las intenciones que como planilla nos unen, son las ganas de trabajar por el Colegio”, acotó el candidato a la Presidencia del CICM y aludió a las tareas que deben emprenderse para abrir espacios de trabajo a los ingenieros mexicanos, incluso contra lo que se conoce como “turismo ingenieril”, es decir, de ingenieros extranjeros que llegan a México con visa de turista pero se quedan a trabajar.

La resultante, citó, es que los ingenieros mexicanos “somos los últimos en ser llamados a proyectos nacionales y nos toman como peones de tablero”.

Así, en la sesión de preguntas y respuestas, se insistió en ampliar el área de influencia del Centro de Actualización Profesional e Innovación Tecnológica (CAPIT) del CICM, en zonas donde puedan tomarse cursos de éste, además de que el Colegio debe  hacer propuestas en las carreras en instituciones de educación superior, con el fin de que los programas de estudios estén acordes con los mercados de trabajo.