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| EFRAIN FLORES IGLESIAS |
Dice
el dicho que el que escupe pa’ arriba… le cae saliva.
Y eso es prácticamente lo
que le está pasando a Luis Walton Aburto.
Sí, ese mero, el empresario que vende litros incompletos de combustible en sus
gasolinerías y dueño de la franquicia Movimiento
Ciudadano en el estado de Guerrero.
Resulta que durante su
gestión como presidente municipal de Acapulco se cometieron diversas
irregularidades financieras, a tal grado que también es corresponsable del adeudo millonario que enfrenta el
Ayuntamiento de Acapulco.
El Ayuntamiento de
Acapulco arrastra un adeudo institucional de 2 mil 210.9 millones de pesos,
según informó este lunes el secretario de Planeación y Desarrollo Económico
(SEPLADE) José Natividad Calixto Díaz,
quien además señaló que la información proporcionada se sustenta en documentos
oficiales, muchos de los cuales han sido proporcionados por funcionarios que
trabajaron en la administración pasada, que estuvieron inmersos en el proceso
de entrega-recepción y que continúan colaborando en el nuevo gobierno
municipal.
Desde
luego que eso no gustó a Walton ni a sus huestes. De
manera inmediata respondieron en las redes sociales, señalando que el gobierno
de Evodio Velázquez “miente” y que carece de fundamento.
Hay que recalcar que el
adeudo histórico no ocurrió solamente en el periodo de Walton, sino que viene
de otras administraciones. Pero eso de que el soberbio empresario gasoninero no
haya sido parte de esa mega deuda, es de risa.
Sus
ex colaboradores y seguidores podrán decir misa, pero no podrán ocultar lo
inevitable.
Walton
no es un político pulcro como presume, también resbaló en la
casa del jabonero.
De hecho, ni siquiera
denunció ante los órganos fiscalizadores al priista Manuel Añorve Baños, con quien se ensañó en los medios de
comunicación al tacharlo de corrupto por dejar una deuda millonaria en 2012.
El
fallido candidato a gobernador de Movimiento Ciudadano se la pasó llorando
cuando estuvo al frente de la Presidencia Municipal de Acapulco.
Ni siquiera obras de impacto social hizo.
Evodio Velázquez, por su
parte, está haciendo las gestiones necesarias ante autoridades federales y
estatales, con el objetivo de encontrar el apoyo y los mecanismos adecuados que
permitan hacer frente al déficit financiero.
Ojalá
Walton acepte que es corresponsable de la deuda que enfrenta el Ayuntamiento
porteño y ya deje de lloriquear.
ENTRE
OTRAS COSAS… Andrés
Manuel López Obrador es un loquillo.
Para él todos los que no
están de acuerdo con su causa, son parte de la mafia del poder.
Ha dicho que sus
adversarios están orquestando de nueva cuenta otro complot en su contra para
frenarlo con miras a la elección presidencial de 2018.
Ay,
don Peje, Usted y su disco rayado de
siempre.
Hasta a ‘El Bronco’ (Jaime
Rodríguez Calderón, gobernador de Nuevo León) ya ve con miedo.
Urge que se vaya a
descansar a su rancho de Palenque, Chiapas, ese que se llama, ¿cómo se llama?
Ah, sí, ya me acordé: rancho “La Chingada”. Y que conste que así se llama, eh.
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E-mail: efrain_flores_iglesias@hotmail.com;
Facebook: Efraín Flores Iglesias;
Twitter: @efiglesias
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