CUATRO MIL POLICÍAS, nada
más, pero nada menos, vigilarán a los turistas que visiten Acapulco en las
vacaciones que inician este fin de semana, lo que indica la importancia que
tiene el turismo para el gobierno de Héctor Astudillo Flores, dado la derrama
económica que cada temporada vacacional que queda en el estado.
No es nuevo decir que
Acapulco es de gran importancia para el estado, toda vez que de éste depende
gran parte de los recursos que recibe. Obvio, sin dejar de lado a
Ixtapa-Zihuatanejo y Taxco que integran el denominado Triángulo Dorado.
Por eso, incluso, el
entonces gobernador Rogelio Ortega consideró como un triunfo de su gobierno la
temporada vacacional de diciembre del 2014. Y por eso es que cada año, en cada
temporada vacacional, el gobierno estatal y federal no solo hacen lo posible
por garantizar la seguridad de los vacacionistas, sino también, se esfuerzan
porque los turistas tengan el mejor servicio y atención.
La última temporada
vacacional, la de diciembre del año pasado, también fue un éxito, no solo en
Acapulco, que estuvo a reventar, es decir, al tope, al cien por ciento, sino
también Taxco e Ixtapa-Zihuatanejo, lo que dejó una millonaria derrama
económica, gracias a la promoción que se hace de nuestros destinos turísticos,
y por supuesto de la seguridad que se brinda a los turistas, sin dejar de lado
que hay un tipo de turismo que siempre, y aún en las peores circunstancias, le
ha sido fiel al puerto.
En un estado como Guerrero
en donde después del turismo no hay más empleo que ser parte de la burocracia,
pues no existen fábricas ni empresas de importancia, ni ningún otro tipo de
actividad que genere crecimiento y desarrollo económico, la industria sin
chimeneas es fundamental para el gobierno estatal.
Por supuesto, hay que
cuidar a los vacacionistas, pues de la derrama económica que dejan, depende en
gran parte la economía del estado. Sin embargo, también es importante que no se
pierda de vista la seguridad de la población, de los guerrerenses, de tal forma
que así como habrá un despliegue importante de policías en los tres principales
destinos turísticos de Guerrero en favor de los paseantes, también es necesario
y urgente que se garantice la de éstos.
Sí. Qué bueno que los 4
mil policías que se han anunciado por parte del gobierno federal para
garantizar la seguridad de los vacacionistas de Acapulco, sean un mensaje de
confianza para quienes visiten el puerto, Paraíso de América, y Perla del
Pacífico. Pero ojalá también se envíen otro tanto para garantizar la seguridad
de todos los guerrerenses.
Y es que, como todo mundo
sabe, los habitantes de la región Centro, Costa Chica, Costa Grande, Tierra
Caliente, la Norte y la Montaña, así como los de la Sierra, también requieren
de que se les garantice su seguridad física, y su patrimonio familiar que, hay
que decirlo, están secuestrados por la inseguridad, la delincuencia y la
violencia.
EN OTRO ASUNTO, es
indudable que las cosas en el PRD no están nada bien. Y si siguen así, como
parece, será muy difícil que el 2018 los agarre preparados. Y será mucho más
difícil si como también parece, van solos a la elección, tras el descalabro del
2015 y la división de la izquierda, o mejor dicho, de los partidos políticos
que se dicen de izquierda.
La renuncia del diputado
Sebastián de la Rosa Peláez, a la coordinación de la fracción parlamentaria del
PRD al Congreso del estado es una muestra de ello, es decir, de la división en
la que se encuentra ese partido, como consecuencia de las pugnas internas y el
cobro de facturas, así como por la falta de liderazgo de la dirigencia estatal
que pareciera que no existe.
Y contra lo que pueda
parecer, quien gana con la renuncia a la dirigencia de la fracción
parlamentaria del PRD en el Congreso local es el propio De la Rosa Peláez,
quien no necesita de la coordinación de los diputados perredistas para ser uno
de los actores políticos de su partido de gran peso. Sebastián gana, entre
otras cosas, el reconocimiento a su congruencia, el reconocimiento a la lealtad
a los principios de su partido, por sobre las conveniencias de los mercaderes
de la política y de la izquierda.
Quien también brilla con
luz propia en el PRD es el diputado Raymundo García Gutiérrez, presidente de la
Comisión de Salud del Congreso local, y a la vez dirigente estatal de la
corriente Democracia Social, quien sin tanto protagonismo hace un trabajo legislativo,
de gestión y partidista que se le reconoce. Es, sin duda, el mejor prospecto
para ocupar la coordinación de la fracción parlamentaria del sol azteca.
Anteriormente ya fue diputado local y presidente municipal de Acatepec. Del
resto de diputados perredistas, ni hablar.
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julio651220@hotmail.com
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