Miguel Ángel Mata Mata |
El domingo pasado Mario
Vargas Llosa escribió en el periódico El País interesante artículo. Describe
una telenovela. Relata sus impresiones por la serie de 70 capítulos que transmite
Tv Caracol y que en México y Miami es repetida por Univisión. Se trata de la
biografía de Pablo Emilio Escobar Gaviria, El Genio del Mal. Un tipo con el
complejo de Edipo, amado, odiado y cuya ambición lo llevó a morir
traicionado por quienes alguna vez le
fueron leales.
En la descripción que hace
Vargas Llosa aparece un párrafo dedicado a la conformación de los grupos de
autodefensa creados en Antioquía, Colombia. Fueron grupos de civiles armados
cuyo fin mediático fue la defensa de los pueblos que sufrían las embestidas del
crimen organizado. Luego se quitó la capucha a esos grupos tan solo para
descubrir su origen: el crimen encarnado, los grupos de ultraderecha
colombianos o agentes extranjeros.
En Antioquía se dedicaron a
cazar inocentes, con el argumento de la debilidad del Estado y la victimización
de comunidades enteras a las que “dedicaron heroicamente sus actividades”,
cuando en realidad fueron cazadores de inocentes y se vendieron al mejor
postor. Posteriormente se descubrió que extranjeros infiltrados asesoraban a
algunas células con el objetivo de quedarse con una parte de ese millonario
negocio que es el tráfico de drogas y que, a Pablo Escobar, le convirtió en uno
de los hombres más ricos del mundo.
En México han aparecido
singulares grupos de auto defensa en zonas en donde se sabe operan grupos de la
delincuencia organizada. Michoacán y Guerrero han sido pioneros en ese
fenómeno. Lo mismo en comunidades rurales
apartadas como en ciudades históricas o con equipamiento urbano, de pronto
han surgido adalides que dicen rescatarán al pueblo de las garras de los
criminales ante la debilidad del Estado “que no puede, no quiere o se ha
amafiado con ellos”, según dicen.
En Michoacán un
narcotraficante al que gusta salir en la tele y en los periódicos, El Profe o
mejor conocido como La Tuta, dio la pauta en un video enviado vía redes
sociales al mundo entero. Hay grupos de autodefensa buenos y malos, según la
visión de este hombre que denunció de manera singular la existencia de una
invasión China a nuestro país y cuya especie fue confirmada este lunes mediante
un reportaje publicado en el periódico Excelsior. Buenos o malos esos grupos, como dice el
narcotraficante, responden a “los buenos cuando son aliados o a los malos
cuando son contrarios”. Maniqueo Don Servando.
En Guerrero la actividad de
estos grupos es inusitada. Costa Chica, Costa Grande y la zona Centro, lo mismo
que una parte de la región de La Montaña, son el escenario preferido de quienes
han tomado las armas cansados “de la indiferencia del gobierno y el aumento de
plagios, extorsiones y ejecuciones”.
Aquí en nuestra entidad
quienes promueven y financian esos grupos son personajes vinculados a la
iglesia católica, políticos del PAN, PRD y PRI, quienes no le dan mayor importancia
al hecho contundente de que tales grupos han sido infiltrados por grupos
guerrilleros lo mismo que por el crimen organizado y, según ha publicado en
periódico El Sur, por ciudadanos con nacionalidad estadunidense.
El craso error cometido por
el gobernador Ángel Heladio Aguirre Rivero, al claudicar la soberanía del
Estado ante un puñado de civiles a quienes entregó armas, vehículos, uniformes
y dinero le ha costado al menos la desconfianza de las fuerzas militares de
México, las que miran con desconfianza que al menos dos familiares directos del
ejecutivo participaron en dos movimientos armados en Centro América y otro en
Colombia.
Se cree que quienes
exportaron el experimento de los grupos de autodefensa colombianos a Guerrero
son, precisamente, miembros de la “Casa Real” y que fueron ellos desde su
cargos de facto como funcionarios públicos quienes empujaron la mano del
gobernador para financiar a quienes hoy se sabe de la boca del obispo Raúl Vera
López son sobrevivientes de la masacre de El Charco, o sea son militantes del
ERPI.
¿Debilidad o complicidad del
Estado? es la pregunta de muchos cuando esos mismos personajes, que tienen la
dualidad de ser parientes en línea
directa del ejecutivo, y se han erigido en el poder de facto tras el
trono, han acudido a Costa Grande a negociar con otro tipo de grupos de
autodefensa que han sido denunciados por las mismas fuerzas armadas de
pertenecer a uno de los grupos del crimen organizado que operan en la zona.
¿Omisión es complicidad?
Preguntan otros cuando revisan la hemeroteca y descubren que el gobierno
estatal da legitimidad a una “comandante comunitaria” que secuestra a un
síndico y a un regidor en Olinalá y descubrir luego por notas de su esposo,
radicado en Seattle, Estados Unidos, que
ella es ciudadana estadunidense.
¿La CIA en Guerrero? no
sería descabellada ni la primera vez que grupos sedicentes de izquierda
defiendan a los agentes del imperio que se han disfrazado como auténticos
revolucionarios defensores del Capital de Marx.
¿Qué haría el imperio en
contra de un extranjero que forme un grupo de autodefensa en gringolandia? Ahí
está Guantánamo para que no le busquen mucho.
El artículo de Vargas Llosa
es ilustrativo, más que la novela televisiva misma, lo mismo que las
advertencias maniqueas de La Tuta son aleccionadoras. Vargas Llosa ubica a
Antioquía como la cuna de los grupos de autodefensa en el mundo. Sin quererlo,
y menos percatarse, el premio nobel como el mismo Profe, han descrito un trozo
de la crónica que se vive en Guerrero: grupos de autodefensa financiados desde
el gobierno, asesorados por parientes en línea directa del ejecutivo, con la
participación de PAN, PRD, PRI, guerrilleros, narcos y, recientemente, la
aparición estelar de una supuesta agente de la CIA que se ha infiltrado por
Olinalá.
El coctel preparado en Antioquía, Guerrero, es
peligroso. Ya lo escribió Vargas Llosa. Ya lo dijo La Tuta. El desenlace de la
telenovela narrada por el premio Nobel culmina con la ejecución del capo de
todos los capos. Dejhar que los parientes cercanos manejan las cosas seria
resulta extremadamente riesgoso para el estado mismo. Ahí esta la prueba: ya el
Ejército desconfía… y mucho.
TRASCENDIÓ
QUE la lucha por las
candidaturas en el PRI comenzó como una puja comercial: se sabe que ya están
apuntados, por el poderoso grupo Añorve,
como aspirantes a una diputación federal Julieta Fernández y Rodolfo
Escobar; por dos diputaciones locales Vicente Trujillo y María del Carmen
Añorve. Los demás ya tienen chamba como delegados o irían a la repesca de una
regiduría.
QUE en el PRD nadie para Armando Ríos Piter quien, además del apoyo del
poderoso Grupo Guerrero, que encabeza David Jiménez Rumbo, trae el respaldo
económico de las mineras instaladas en Guerrero, con las que tiene muy buena
relación el joven Jaguar. Quien le sigue en preferencias es la Secretaria de
Desarrollo Social, Beatriz Mojica y dos
que tres “piripituches” que amenazan a sus empleados con despedirlos en caso de
no instalar una casa de gestoría en sus domicilios y anotar a todos sus
familiares en comités de apoyo al suspirante. ¿Les damos nombres, ubicación y
grabación de la amenaza? Ese es un delito electoral, así sean empresas
privadas.
QUE el presidente municipal
de Acapulco, Luis Walton Aburto, superó la dura prueba de una peritonitis,
luego que le estalló el apéndice. Muchos son los que oraron por su pronto
restablecimiento. Fue atendido en el hospital ABC de la ciudad de México.
QUE la agenda legislativa
nacional será diseñada por primera vez en la historia desde el estado de
Guerrero. Será a finales de este mes de agosto cuando sesionen en Acapulco más
de 700 diputados locales de todos los Congresos Estatales, durante la reunión
plenaria de la COPECOL. La reunión, desde donde saldrán propuestas al Congreso
de La Unión, concluirá pocos días antes de que arranque el segundo periodo del
Legislativo Federal, y durante el cual serán discutidas las reformas
estructurales del país mas importantes en décadas. Bien por Bernardo Ortega, quien ha sabido
torear a las oposiciones de dentro y fuera de su fracción parlamentaria para
lograr prestigio para Guerrero y, posiblemente, una candidatura federal en el
futuro cercano.
PREGUNTAS
QUE MATAN
¿No que todo cambiaría para
bien en la Comisión de Agua Potable de Acapulco? Resulta que se fue el director
con gustos por los yates y el dinero fácil y llegó uno que, de inmediato,
ordenó cortar un servicio que de por si no existe. ¿Así como, pues, señor
presidente municipal?
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