lunes, 26 de octubre de 2015

MIRADA INTERIOR El huracán del siglo: puro cuento pinolero Astudillo: retos del poder Por: Isaías Alanís

ISAIAS ALANIS TRUJILLO
Después de la tormenta que no lo fue y por arte de magia se desactivaron las ayudas internacionales ante el descaro de que todo había sido un teatro montado por el gobierno federal. Y mientras el presidente, desencajado, con el ojo izquierdo visiblemente hinchado lanzó una proclama al país  por la televisión oficial en el sentido de que el Apocalipsis llamado “Patricia” iba a dejar más millones de pobres y damnificados salarialmente. Sin casas, y con ganas de mentarle la madre a todos los dioses del cielo y del averno. Sin embargo, pese a que los especialistas señalaron que fueron infundados los mensajes de catástrofe, en ese  preciso momento y pese a que el propio Peña Nieto y Luis Videgaray habían anunciado que no habría incremento a la gasolina, los trabajadores a destajo de San Lázaro, siguiendo el guión  pinolero, autorizaron un “rubro especial”, de incremento a las gasolinas; 4.16 pesos por litro de Magna, 3.52 pesos por litro de Premium y 4.58 pesos por litro de diésel. Sopas y zas, el huracán del siglo, que tampoco lo fue y según el más poderoso, se diluyó en una tormenta tropical de incrementos a la gasolina. O sea, que el ciclón más monstruoso de la historia, mentira, a todas luces sólo fue producto de una guerra mediática instrumentada por los asesores extranjeros de EPN para desviar la atención ante tantos problemas y porque el presidente sigue estando a la baja en las preferencias de los mexicanos.

Los retos de HAF

En este escenario, hoy en punto de las once de la mañana, rendirá protesta como gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores. Y como me lo dijo un amigo del gobernador constitucional la noche de tomar café en conocido restaurante de Chilpancingo que “Héctor se va enfrentar a los retos más grandes que ha tenido un gobernante en la historia de Guerrero”. “No quisiera estar en sus zapatos. “. “Desde la administración de René Juárez Cisneros, para achicar el comentario y sintetizar los argumentos, a los dos gobiernos cuasi perredistas, Zeferino Torreblanca y de Aguirre Rivero, el estado se ha pulverizado en todos los rubros, pero principalmente en el de la violencia y la corrupción desmedida, imparable e impune”. “Le toca a Astudillo enfrentar con pundonor estas dos puñaladas que ha sufrido la administración del estado tanto del régimen priista como del cuasi perredista, otro día te digo porque los llamo así, tanto a Torreblanca como a Aguirre”.

Guerrero sigue siendo el estado más violento del país, más pobre y demás adjetivos. Sin embargo, el amigo tiene razón; ningún gobernante de los tiempos modernos va enfrentarse a lo más granado de la delincuencia y la corrupción. Como lo afirma el compañero de charla, que “Astudillo debe de contar con el consenso de todos los guerrerenses”. Si no, esto no va ser posible. La severa crisis es alarmante y tiene matices turbios que permiten saber cómo se ha desarrollado, no sólo por el “descubrimiento tardío de que Guerrero es uno de los estados que ocupa el primer lugar en la siembre de amapola”. Si no que los mismos gobiernos se han tapado. Zeferino cubrió a René, Aguirre a Zeferino. Héctor Astudillo tiene que hacer un borrón y cuenta nueva para poder luchar contra los principales males que padece Guerrero, que se han convertido en lugar común y motivo de burlas de algunos políticos. El interinato de Rogelio Ortega Martínez, sólo fue una administración de entre pedales. No había salida a la crisis en tan corto tiempo y se desempeñó con estoicismo aguantando vara de todos lados, incluyendo a grupos de universitarios que se sintieron desplazados de la administración.

La problemática de Guerrero es profunda. HAF, tendrá que luchar contra los mismos demonios. Esos grupos de malignos que han estado durante décadas en el poder o tras de él, sean del PRI, PRD, MC, PAN, PANAL. Por tanto la conformación de su gabinete tendrá que ser la señal de con quién y como va a gobernar mientras se pagan cuotas de poder y se arma un trabuco a la altura de su personalidad y de las necesidades más urgentes de Guerrero.

Astudillo ya sufrió en carne propia el huracán de la violencia con su lluvia de balas y el pánico de  por medio que se gesta en esos momentos de crisis y angustia por sobrevivir. Ahora tiene el deber de demostrar que lo que él, su esposa y sus cercanos sufrieron la noche del sábado en la costera de Acapulco, en un restaurante de comida italiana donde por cierto ultimaron a un mafioso italiano, lo ha dejado marcado para hacer un llamado al gobierno federal y a  todos los segmentos de la población, organizaciones civiles y partidos políticos a enfrentar la violencia con políticas públicas  que coadyuven a su extirpación de la vida de la entidad.
Y para eso, tendrá que contar con la participación de todas y todos, y como me lo explicó su amigo; “lograr un concierto  nuevo, dinámico y poderoso para evitar que vivaces y “mañosos” entren a la administración pública, igual que viejos políticos “lacrosos” que durante años han estado en la ubre sin hacer otra cosa que robarse el presupuesto de Guerrero a ojos vistos…”. De igual forma, lidiar con la “oposición de conveniencia”, o sea, no,  aquella que grita, pone la mano y deja de joder. O la que en horas crueles para el movimiento de los normalistas, declara que dio aviso al ejercito de que estaba su propia policía matando a los normalistas. Tal y como se filtró a la prensa que fue declarado por José Luis Abarca.

El 27 de octubre de 2015, no sólo se abre una fecha histórica en la fundación del estado de Guerrero. Hoy se abre la posibilidad de generar la refundación del estado.  En su discurso de hoy en Acapulco, HAF tiene el deber histórico de hacerlo y afrontar los retos del poder en plena crisis que vive el país y Guerrero.
Eso se sabrá muy pronto. Esperemos por la paz de los guerrerenses que así sea.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.