El affaire de la diputada federal perredista Purificación Carpinteyro fue sui generis colofón de las negociaciones de las leyes secundarias de la reforma en materia de telecomunicaciones. No habrá más sacrificados; en política no hay casualidades.
Verdad de Perogrullo, las reacciones variopintas y los silencios y soslayos elementales de actores políticos e interesados en este sector donde se juegan multimillonarios negocios son como la sorpresa frente al descubrimiento del hilo negro. Veamos.
En su despedida del área de colaboradores del diario Reforma, Carpinteyro pretende aparecer víctima de un juego que ya había jugado, el de la delación perjudicial. Luis Téllez Kuenzler fue su víctima.
“Pero lo que más me mortifica –aduce la cándida Purificación--es el enojo que siento conmigo misma por descuidarme cuando nadaba con tiburones. Todos, algún día, cometemos errores, yo he cometido los míos, y lo peor es que -como todos- los seguiré cometiendo mientras viva. Vivir es errar.” El pez por la boca muere, aleccionador refrán que la legisladora olvidó en el pírrico éxito que la invadió.
¿Y qué del resto de los legisladores que, como se avista, a más tardar entre el próximo viernes 4 y el martes 8 de este mes concluirán con este rally de las reformas a leyes secundarias en materia de telecomunicaciones?
Ninguno de los siete senadores y nueve diputados federales que integran la “telebancada” y que Purificación Carpinteyro pidió en su despedida sean juzgados y confrontados por su conflicto de intereses, reaccionó ni reaccionará ni renunciará a participar en la discusión de los dictámenes en materia de telecomunicaciones que se aprobarán en los próximo días. Y punto.
Lo de la cándida Purificación ya es historia. El viernes último, a César Camacho, presidente del CEN del PRI, le plantearon si los legisladores priistas de la telebancada se excusarían de participar en la discusión de las leyes secundarias en materia de telecomunicaciones como pidió Jesús Zambrano Grijalva, es decir, su contraparte del PRD.
"Los legisladores del PRI –respondió Camacho--están en actitud y aptitud no solo de discutir, sino de votar", esas leyes porque, adujo, El PRI va a ejercer esos derechos y "todos sus legisladores van a ejercer la representación que les dio el electorado cuando los ungió". ¿Más claro?
Zambrano pretendió una salida digna para Purificación y argumentó: "está probado el conflicto de intereses, pero esos no están pensando en hacer negocios, sino que ya son parte de los negocios, 12 diputados por lo menos de la llamada telebancada, tanto del (partido) Verde como del PRI". ¿Y?
No es un secreto la procedencia de los siete senadores y nueve diputados federales y que tienen vínculos con las principales televisoras y radiodifusoras del país. Son plurinominales, porque así se llama el juego y el sistema de partidos políticos no lo prohíbe. En todo caso, cuando sus nombres fueron integrados a las comisiones, debieron ser cuestionados por la oposición que hoy se rasga las vestimentas.
Así se han votado las leyes en México; también, así, se han enviado a la congeladora iniciativas para inhibir y prohibir el tráfico de influencias y el conflicto de intereses de los diputados y los senadores. ¿Por qué no sacar del congelador las dos minutas de fecha 19 de abril de 2007 para aprobar los dictámenes en comisiones y luego en el pleno del Palacio Legislativo de San Lázaro?
Es la praxis política dar largas, atender a intereses. Que nadie se llame engañado. Por ejemplo, concretar el acceso a la información pública y la protección de datos personales, tardó más de una década en aterrizar en el acuerdo de los partidos políticos para reformar a la Constitución y leyes secundarias que los obligaron, junto con los sindicatos y fideicomisos con participación de recursos públicos, a abrir sus cuentas e información a la sociedad.
Cada cual con sus intereses. Purificación los cita como si fuera desconocido que los senadoresNinfa Salinas, hija de Ricardo Salinas Pliego, presidente de TV Azteca; Armando Melgar, presidente de Canal 40; Javier Lozano Alarcón, acusado de ser autor de la Ley Televisa 2;Emilio Gamboa Patrón, impulsor de la Ley Televisa; Gerardo Flores, asesor y ex funcionario de Iusacell; Arely Gómez González, hermana de Leopoldo Gómez, Vicepresidente de Televisa;Mónica García de la Fuente, miembro jurídico de Televisa, tienen bien claros sus intereses en el Congreso de la Unión.
Lo mismo ocurre con los nueve diputados federales vinculados con telecomunicaciones, según lo difundido por Carpinteyro: Carlos Jorge Mendoza, Vicepresidente de Grupo Azteca;Federico González Luna, ex representante de la CIRT y autor de la Ley Televisa; Laura Ximena Martel, ex presidenta de la CIRT; Antonio Cuéllar Steffan, ex director jurídico de Televisa;Javier Orozco Gómez, abogado de Televisa; Enrique Cárdenas, accionista de la Organización Radiofónica Tamaulipeca; Homero Niño de Rivera, ex director de comunicación social de la Secretaría de Gobernación Calderón y autor del cambio de la palabra “comprar” por “adquirir” para beneficiar a los medios; Patricio Flores, dirigente del SITATYR; Y Rubén Acosta Montoya, ex director ejecutivo de la Cofetel.
¿Influyó en algo Purificación? Emilio Gamboa ni la cita en su declaración dominical. Su discurso es el mismo rollo de que “el PRI seguirá abierto al diálogo con las demás fuerzas políticas” y etcétera.
Y el coordinador de la diputación federal perredista, Silvano Aureoles, simplemente llama “a las demás fracciones parlamentarias a tener altura de miras en la discusión de las leyes secundarias en materia de telecomunicaciones y actuar con sensatez y pulcritud para evitar que haya beneficios particulares entre agentes externos, sobre un bien nacional que es el espectro radioeléctrico”. Nada de escándalo.
Y, por si alguna duda había, Manlio Fabio Beltrones cierra discrepancias e ilustra: “El reciente acuerdo entre los grupos parlamentarios representados en el Congreso de la Unión nos da la confianza de que, a partir de esta semana, vamos al cierre definitivo de las reformas secundarias en materia de telecomunicaciones y de energía”. ¿Algún damnificado? Conste.
LUNES. Del verbo reformar: Yo negocio, tú negociabas, nosotros negociaremos, ellos se dejarán negociar. Digo.
@msanchezlimon
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