MOISÉS SÁNCHEZ LIMÓN. |
¿Recuerda usted aquel
comercial en el que el nieto se quejaba de la discusión de sus abuelos respecto
de la preferencia por el sabor de un panqué? “Y esto –decía el niño-- ¡es
tooodos los días!”
Valga la referencia para
aludir a posturas de comercial, es decir, huecas, fingidas y harto conocidas en
el Congreso de la Unión. Hace un par de semanas, cuando había concluido el
periodo ordinario de sesiones, Emilio Gamboa, coordinador de la bancada
senatorial priista, reclamó a sus contrapartes del PAN y del PRD en el Senado
que, pese a contar con mayoría, no aprobaron el paquete de reformas que
integran al Sistema Nacional Anticorrupción.
Por supuesto, del PAN y
del PRD respondieron airadamente a Gamboa, quien es una mojarra enjabonada o
--diría Juan José Prado—una iguana muy apedreada que sabe por dónde viene el
golpe y lo escabulle con magistral demagogia. Y, bueno, así ha sido Emilio
desde que saltó a las ligas mayores cuando Miguel de la Madrid le abrió la
puerta del despacho presidencial. En fin.
Gamboa, se refugió en el recurso del periodo
extraordinario y se pronunció por apoyar el que fuera y cuándo fuera con el fin
de sacar los pendientes, especialmente la legislación anticorrupción. Y en la
Cámara de Diputados no es distinto.
La semana pasada, cuando
la Sección Instructora dictaminó procedente instruir proceso de desafuero a la
diputada local sinaloense Lucero Guadalupe Sánchez López, el presidente de la
Mesa Directiva de la Cámara baja, Jesús Zambrano Grijalva, echó campanas al
vuelo y se sumó a los aprestos de los coordinadores de las bancadas del PAN,
Marko Cortés, y del PRD, Francisco Martínez Neri, por cuanto a convocar periodo
extraordinario antes del fin de este mes de mayo.
Zambrano, incluso dijo que
podrían incluirse algunos temas pendientes de Sistema Nacional Anticorrupción,
para votarlos en el periodo extra.
Quizá el sonorense pensó
que de otro lado de la banqueta, César Camacho Quiroz, coordinador de la
diputación federal del PRI, además de presidente de la Junta de Coordinación
Política, estaba en calidad de párvulo y no otearía la emboscada que le
tenderían las bancadas de la oposición, para aprovechar el viaje y, vísperas de
la jornada electoral del domingo 5 de junio, hacer cera y pabilo de las
campañas del tricolor en los 13 estados donde habrá elección.
Por supuesto, el PRI no
aceptaría un periodo extra antes de los comicios, como para qué. Así, César
Camacho declaró el sábado último en Mexicali, Baja California, que no habrá
periodo extraordinario porque, verdad de Progrullo, sólo contaminaría al
proceso. Asunto elemental y, por ende, al PRI le acomoda que sea hasta después
del cinco de junio.
Fue, la embestida de
perredistas y panistas, una broma de mal gusto. A nadie entierra en la víspera.
La prisa para que la Sección Instructora acelerara el dictamen, fue una medida
engañabobos. Porque, sin duda, a nadie conviene convertir al pleno del Palacio
Legislativo de San Lázaro en arena extramuros de la campaña electoral.
Por supuesto, el lunes
último --¿por qué hasta el lunes?--, diputados federales del PRD y del PAN
recriminaron al PRI su negativa a desahogar de inmediato un periodo
extraordinario de sesiones para abordar el desafuero de la diputada local
Lucero Sánchez y advirtieron que con ello se incumple la ley.
El coordinador de los
diputados del PRD, Francisco Martínez Neri, señaló que la propuesta de postergar
el periodo extraordinario hasta después de las elecciones no se apega a
derecho, pues el proceso del juicio de procedencia tiene términos precisos
establecidos en la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos,
sobre los cuales, se pretenden imponer valoraciones políticas.
Cierto, es probable que no
se apegue a derecho. ¿Y? Así se juega en el Congreso de la Unión, una pelota
ensalivada o engañabobos no es nueva en este escenario en el que, como refiere
aquel niño del comercial, “esto es toooooooooooooooooodos los días”. Conste.
MIÉRCOLES. Por cierto,
ayer martes, como si no le quedara claro al coordinador de los diputados
federales del PRD, este asunto del periodo extraordinario, junto con Francisco
Xavier Nava, vocero de la bancada perredista, anunciaron que este miércoles, en
la sesión de la Comisión Permanente, solicitarían convoque a extra porque hay
cinco dictámenes para que el pleno los discuta y apruebe. ¡Ah!, casualmente
insisten respecto del desafuero de la legisladora sinaloense.
Peeero, de inmediato se
dieron frentazo con una resolución de la
Primera Comisión de la Permanente, en términos de que la solicitud para
celebrar periodo extraordinario en el Cámara de Diputados y en el Senado tiene
que acordarse por la Junta de Coordinación Política de cada Cámara por su
carácter de órganos colegiados. ¿Y sabe usted quienes presiden dichas juntas?
¡Exacto! ¡El PRI! Digo.
sanchezlimon@gmail.com
www.entresemana.mx
@msanchezlimon
Vanguardia en línea
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.