Isaias Alanis |
Desde que el navegante, cura, cosmógrafo,
explorador, militar y piloto Andrés de
Urdaneta, participó en las expediciones de Jofre de Loaisa y Miguel López de
Legazpi y por su pensamiento y conocimiento visionario hizo posible la ruta
conocida como del tornaviaje o de Urdaneta que comprende la travesía de
Filipinas a Acapulco, abriendo el comercio y la cultura en dos sentidos, el de
ida y el de regreso; Acapulco se convirtió en un puerto internacional en la
época de la colonia y en la perla del Pacífico de la Nueva España pese a que
los proyectos de Hernán Cortes por conquistar la mar del sur, fracasaron cuando
sus astilleros de Zacatula fueron incendiados por los mismos hombres que lo
celaban y le profesaban terribles envidias.
En pleno proceso de la reconstrucción de
Guerrero por los huracanes, el puerto vuelve a la vida como un sabroso coctel
como el que sirven en las enramadas tradicionales de las costas de Guerrero
preparado con limón, jitomate, salsas, chile y mariscos frescos. Después de una resaca como la que nos dejaron los huracanes,
el foro mundial de la gastronomía es oxígeno puro y alienta a proseguir en el
camino y las rutas trazadas para la reconstrucción de Guerrero puestas en
marcha por el gobierno federal y estatal.
Del 9 al 12 de octubre el puerto y la Expo
mundial Acapulco, serán sedes del Foro Mundial de Gastronomía. La riqueza
temática de los diferentes talleres, guisantes y caldos, carnes y ensaladas,
recuperación de los maíces tradicionales de México, el volver a sacar del galeón la
canela y las especias y preparar un guinatán con olor a océano quemado en una
olla de barro. Y que durante cuatro días las arboladuras de los barcos y sus
cocinas echarán amarras en Acapulco y de hornos, parrillas, vaporeras, tinas y
las manos mágicas de chefs profesionales y guisanderas tradicionales de México,
será posible escuchar la chilena y el son del sabor del ron y el movimiento de
las caderas de las cocineras al compás del fuego y entre sabrosos tragos de
Mistela fermentado con jugo de mangos y Posh de Chiapas; Bacanora, Tuba del
corazón de la palmera, Tequila en jarro y mezcal en cuenco de cirián retornar
en el viaje de Urdaneta y arribar con las alforjas llenas de olores y sabores,
de aromas y vapores, de carnes de todo tipo y del corazón fulgurante de una
cocinera que prepara y conjura al demonio de la pasión con los sabores de
México y de los hornos de la mar océano.
El objetivo de este foro según sus
organizadores es “promover la cocina popular a través de las cocineras y los
portadores de los saberes tradicionales, destacando las cocinas regionales de
México.
Impulsar el turismo gastronómico en México a
partir de su cocina tradicional y de avanzada. Fortalecer la imagen de México
como país del buen comer. Contribuir a la promoción del Puerto de Acapulco con
muestras gastronómicas de México y de los países invitados. Manifestaciones de
cocina tradicional y cocina de avanzada. Conferencias y talleres prácticos
sobre cocinas regionales, producción alimentaria, técnicas tradicionales y
modernas, ciencias de la nutrición, la alimentación y la sustentabilidad
alimentaria. Presentación de productores de alimentos e industrias
alimentarias. Mesas de negocios sobre turismo cultural y destinos
gastronómicos…” Y que de esta experiencia del foro salgan propuestas para
“contribuir al rescate, salvaguardia y promoción de la cocina mexicana en
cumplimiento de los compromisos adquiridos ante la Convención del Patrimonio
Cultural Inmaterial de la UNESCO y promover los intercambios de conocimientos y
las relaciones económicas entre la gastronomía y la producción de alimentos a
escala nacional e internacional…”
Los saberes del agua el fuego el éter y la
mano del hombre y la mujer serán
expuestos en diversas formas, técnicas y labores. También no podría faltar la
“exhibición y venta de artesanías y utensilios contemporáneos para la cocina y
la mesa, libros, revistas y materiales audiovisuales sobre gastronomía. Y sin
faltar las manifestaciones artísticas
relacionadas con ésta de México y los países invitados y en ese marco oloroso,
vaporoso y picante en medio de atanores calientes a deseo hacerles
reconocimientos a chefs, cocineras tradicionales, maestros y estudiantes
destacados en cocina mexicana. Y una exposición de productos del campo,
orgánicos y de industrias alimentarias y desde luego las influencias,
cruzamientos y líneas de sabores entre Asia y México.
Ya se me está antojando participar en esa
fiesta de los sabores.
DE REOJO
El Aero show trágico
No basta con que se suma mucha gente en contra
de la reforma anunciada, el jefe de gobierno de la Ciudad de México, que él no
tuvo la culpa de los agentes que detuvieron, golpearon e incitaron a la
violencia vestidos de civiles. Que el Peje va con Cuauhtémoc. Y que la neta
Pemex no se vende, y Peña Nieto desde el otro mundo, que se regala y que
asumirá los costos de la privatización del petróleo. De que en Guerrero sigan
pueblos incomunicados, que hay un posible brote de influenza en Acapulco, que
el “amigo se fue de Tixtla porque son bien gachas sus autoridades y que no pasa
nada en este país.
Y que el sábado pasado en el Aero show
celebrado en Chihuahua, una Monter truco,
arrolló a los asistentes a ese dizque festival matando hasta ahora a 9 personas
e hiriendo a decenas. “El “accidente”
ocurrió durante una exhibición de acrobacias con vehículos aéreos y terrestres
que cumplía su tercera edición anual en el parque metropolitano El Rejón.
Y todos en Chihuahua, se andan echando la
bolita que si la culpa es del chofer, de los que dieron los permisos, de los organizadores
o de la falta de prevención en deportes extremos.
En Guerrero, pasa lo mismo, nadie sabe aún lo
que todos sabemos quién autorizó los permisos para construir edificios en
humedales.
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